China inicia hoy los tres días de duelo nacional impuestos por el Gobierno en recuerdo de las más de 30.000 víctimas mortales del seísmo que sacudió el sudoeste del país hace una semana. El Gobierno informó que se suspenderán los espectáculos públicos, las banderas permanecerán a media asta, y habrá tres minutos de silencio cuando se cumpla una semana exacta del terremoto. La bandera nacional ya ondea a media asta en la plaza Tiananmen, en el centro de Pekín, tras una ceremonia que se desarrolló al amanecer. La marcha de relevo de la antorcha olímpica, que actualmente recorre territorio chino, también ha sido suspendida tres días.
China inicia hoy los tres días de duelo nacional impuestos por el Gobierno en recuerdo de las más de 30.000 víctimas mortales del seísmo que sacudió el sudoeste del país hace una semana.
El Gobierno informó que se suspenderán los espectáculos públicos, las banderas permanecerán a media asta, y habrá tres minutos de silencio cuando se cumpla una semana exacta del terremoto. La bandera nacional ya ondea a media asta en la plaza Tiananmen, en el centro de Pekín, tras una ceremonia que se desarrolló al amanecer. La marcha de relevo de la antorcha olímpica, que actualmente recorre territorio chino, también ha sido suspendida durante estos tres días.
En todo el país las sirenas y las bocinas de coches, trenes y barcos sonarán en señal de 'profunda pena' a las 14.28 hora local, momento en que el temblor de tierra se produjo hace una semana, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
Además, las bolsas de Shangai y Shenzhen y los mercados de futuros en Shangai, Zhengzhou y Dalian detendrán su actividad durante tres minutos también a esa hora. Por su parte, los presentadores de la televisión estatal se vistieron de negro y varios periódicos oficiales se imprimieron en blanco y negro sin fotos color.
En Beichuan, en la provincia de Sichuan, uno de los lugares más castigados por el terremoto en el sudoeste chino, las personas continúan viajando a la zona de desastre para buscar a miembros de sus familias y ver con sus propios ojos el daño sufrido.
'Es una buena idea pero quizás sea demasiado pronto', declaró Zhou Wanli, uno de los afectados, sobre el duelo nacional declarado, mientras se dirigía a Beichuan sentado en la parte trasera de un camión. 'Todo lo que podemos hacer por el momento es encontrar a nuestros familiares. No queremos rendir tributo a sus memorias si no sabemos si están vivos o están muertos', añadió.
Nuevo temblor
En la víspera del duelo nacional, un nuevo temblor en el sudoeste chino provocó la muerte de tres personas e hirió a unas 1.000, mientras que miles abandonaron asustadas sus hogares. El temblor, una de las más fuertes réplicas desde el terremoto del 12 de mayo, sacudió la ciudad de Jiangyou en Sichuan.
La cifra oficial de muertos por el seísmo de magnitud 7,9 se mantiene en alrededor de 32.500 personas y hay unas 220.000 heridas. A esto se une las 9.500 más que permanecerían sepultadas por los escombros en Sichuan, aunque se teme que la mayoría de estas estén ya muertas. Por este motivo, China estima que la cifra final de muertos supere los 50.000, mientras que ha desvelado que alrededor de 4,8 millones de personas han perdido sus viviendas.
200 trabajadores de salvamento, sepultados
Más de 200 trabajadores de los servicios de salvamento han quedado sepultados a causa de un corrimiento de tierras en la zona del suroeste de China afectada la semana pasada por un terremoto de 7,9 grados, según informó la agencia estatal de noticias Xinhua.
El Gobierno informó que se suspenderán los espectáculos públicos, las banderas permanecerán a media asta, y habrá tres minutos de silencio cuando se cumpla una semana exacta del terremoto. La bandera nacional ya ondea a media asta en la plaza Tiananmen, en el centro de Pekín, tras una ceremonia que se desarrolló al amanecer. La marcha de relevo de la antorcha olímpica, que actualmente recorre territorio chino, también ha sido suspendida durante estos tres días.
En todo el país las sirenas y las bocinas de coches, trenes y barcos sonarán en señal de 'profunda pena' a las 14.28 hora local, momento en que el temblor de tierra se produjo hace una semana, informó la agencia oficial de noticias Xinhua.
Además, las bolsas de Shangai y Shenzhen y los mercados de futuros en Shangai, Zhengzhou y Dalian detendrán su actividad durante tres minutos también a esa hora. Por su parte, los presentadores de la televisión estatal se vistieron de negro y varios periódicos oficiales se imprimieron en blanco y negro sin fotos color.
En Beichuan, en la provincia de Sichuan, uno de los lugares más castigados por el terremoto en el sudoeste chino, las personas continúan viajando a la zona de desastre para buscar a miembros de sus familias y ver con sus propios ojos el daño sufrido.
'Es una buena idea pero quizás sea demasiado pronto', declaró Zhou Wanli, uno de los afectados, sobre el duelo nacional declarado, mientras se dirigía a Beichuan sentado en la parte trasera de un camión. 'Todo lo que podemos hacer por el momento es encontrar a nuestros familiares. No queremos rendir tributo a sus memorias si no sabemos si están vivos o están muertos', añadió.
Nuevo temblor
En la víspera del duelo nacional, un nuevo temblor en el sudoeste chino provocó la muerte de tres personas e hirió a unas 1.000, mientras que miles abandonaron asustadas sus hogares. El temblor, una de las más fuertes réplicas desde el terremoto del 12 de mayo, sacudió la ciudad de Jiangyou en Sichuan.
La cifra oficial de muertos por el seísmo de magnitud 7,9 se mantiene en alrededor de 32.500 personas y hay unas 220.000 heridas. A esto se une las 9.500 más que permanecerían sepultadas por los escombros en Sichuan, aunque se teme que la mayoría de estas estén ya muertas. Por este motivo, China estima que la cifra final de muertos supere los 50.000, mientras que ha desvelado que alrededor de 4,8 millones de personas han perdido sus viviendas.
200 trabajadores de salvamento, sepultados
Más de 200 trabajadores de los servicios de salvamento han quedado sepultados a causa de un corrimiento de tierras en la zona del suroeste de China afectada la semana pasada por un terremoto de 7,9 grados, según informó la agencia estatal de noticias Xinhua.
