El nuevo gobierno de derecha encabezado por la conservadora Erna Solberg asumió ayer formalmente el poder en Noruega en un Consejo de Estado extraordinario celebrado en el Palacio Real de Oslo.
La líder conservadora presentó así su gobierno en coalición con el Partido del Progreso (FrP), la fuerza considerada como de extrema derecha en el espectro político nacional y del que su líder, Siv Jensen, encabezará el Ministerio de Finanzas.
Solberg, la segunda mujer primera ministra en Noruega tras la laborista Gro Harlem Brundtland, preside un gobierno en minoría con 18 ministros, dos menos que el anterior gabinete, y en el que el Partido Conservador controlará once carteras y el xenófobo Partido del Progreso, por primera vez en el poder, las siete restantes.
Solberg, la segunda mujer primera ministra en Noruega tras la laborista Gro Harlem Brundtland, preside un gobierno en minoría con 18 ministros, dos menos que el anterior gabinete, y en el que el Partido Conservador controlará once carteras y el xenófobo Partido del Progreso, por primera vez en el poder, las siete restantes.
