Al menos 84 personas han resultado heridas este jueves cuando las fuerzas de seguridad yemeníes han reprimido dos manifestaciones antigubernamentales, una en la ciudad meridional de Taiz y otra en Saná, disparando balas reales y usando gases lacrimógenos, según han informado varios activistas.
Varios manifestantes que han salido a las calles para exigir el fin del régimen encabezado por el presidente Alí Abdulá Salé han dicho que en Taiz resultaron heridas 80 personas, mientras que en la capital han sido cuatro. Este miércoles, las fuerzas de seguridad intentaron disolver una protesta en la ciudad de Hudaida, en la costa del mar Rojo, dejando heridas a unas 150 personas.
Las manifestaciones en contra de Salé, que lleva 32 años en el poder, comenzaron hace varias semanas. Tanto quienes participan en estas protestas como quienes han expresado en las calles su apoyo al Gobierno parecen estar recurriendo cada vez más a la violencia, pero varios activistas han asegurado que en las últimas manifestaciones los participantes fueron pacíficos.
Por otro lado, la página web gubernamental 26 de septiembre ha indicado que tres milicianos supuestamente vinculados con Al Qaeda han muerto este jueves mientras intentaban atacar un puesto de control del Ejército en la provincia de Marib.
