La reactivación del volcán Llaima obliga a activar los planes de emergencia en Chile

Imagen del volcán Llaima. (Foto: Gonzálo Pereira)
El volcán Llaima, a unos 600 kilómetros al sur de Santiago, volvió a entrar en erupción en la noche del viernes, lo que obligó a evacuar a tres personas y a activar los comités de emergencia municipal y regional, según informa la prensa local.
El volcán, que desde hace medio año no presentaba ninguna actividad, registra explosiones constantes de material incandescente que se elevan hasta 600 metros de altura sobre el cráter, de 3.210 metros de altitud, y provocan la caída de cenizas y escoria.

La lava supone uno de los principales peligros debido al derretimiento de la nieve y la posible formación de avalanchas volcánicas y lahares, que son deslizamientos de barro, resultado de la mezcla de ceniza volcánica y escombros con agua.

Hasta ahora sólo hay tres personas evacuadas del centro de esquí Las Araucarias y se estima que en las próximas horas serán desalojadas otras catorce que se hallan en el Parque Nacional Conguillío, en cuyo interior se alza el macizo.

Según informa la edición digital del diario El Mercurio, las personas que se encuentran en el parque, donde están cayendo gran cantidad de cenizas del volcán, son dos turistas, siete guardas y cinco albañiles.

El Comité Regional de Emergencia mantendrá hoy en Temuco, capital de La Araucanía, una reunión para evaluar la situación, decretar la alerta amarilla o roja y decidir si se ordena evacuar a la población cercana en caso de que sea necesario.

El Llaima, que está considerado uno de los volcanes más activos de Suramérica, se encuentra a unos 76 kilómetros al noreste de Temuco, capital de la región de La Araucanía, y a sus pies se levantan las localidades de Curacautín, Cherquenco y Melipeuco.

El vulcanólogo del Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomín) Hugo Moreno explicó que fueron los vecinos de Melipeuco y Cherquenco quienes alertaron de la situación, al tiempo que los sismógrafos detectaron también un aumento de la actividad.

Según Moreno, esta reactivación forma parte del proceso eruptivo iniciado en mayo de 2007 y que ha tenido periodos muy intensos en enero, febrero y marzo de 2008, pero había disminuido su fuerza desde mediados del año pasado.

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