Los rebeldes libios han corrido suertes distintas en Sirte, donde tomaron posiciones dentro de la ciudad, y en Bani Walid, donde acabaron retrocediendo.
El miembro de la oficina política de la Alianza del 17 de febrero de Misrata, Mohamed Obeid, aseguró a que 'los rebeldes se han atrincherado en los alrededores de la calle Wadi Dogo', en el suroeste de Sirte, la ciudad natal del coronel Muamar al Gadafi. Asimismo, la televisión nacional 'Libia Hurra' aseguró que los combatientes tomaron el aeropuerto de la ciudad y un cuartel de las tropas gadafistas en una zona cercana a la ciudad.
Por otra parte, según explicaron dos combatientes rebeldes, Ihab Ben Salim y Hamza Alwan, recién llegados a Trípoli del frente de Bani Walid, los milicianos se vieron obligados a retroceder después de haber entrado en la localidad, a 150 kilómetros al sureste de la capital, debido a la resistencia de las brigadas gadafistas. Las fuentes aseguraron que los soldados gadafistas emplearon bombas de racimo, proyectiles de mortero y numerosos francotiradores situados en dos puntos elevados de la zona e impidieron el avance.
En su lucha, los rebeldes covlieron a contar con el apoyo de la OTAN, cuyos aviones atacaron objetivos militares de las fuerzas gadafistas en las ciudades de Sebha y de Sirte.
'UNA LECCIÓN AL MUNDO'
Por otra parte, un día después de la visita oficial a Libia del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro británico, David Cameron, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, aterrizó en Trípoli y declaró que 'ningún Gobierno puede mantenerse mediante la fuerza y contra la voluntad del pueblo'.
Erdogan le dijo a una multitud de ciudadanos sirios que son 'los que demostraron a todo el mundo que ningún Gobierno puede mantenerse mediante la fuerza y contra la voluntad del pueblo'. Además, el primer ministro turco afirmó que los libios han enseñado a 'todo el mundo' lo que les espera a los que coaccionan a los ciudadanos.
El mandatario turco también se refiri al presidente de Siria, Bashar al Assad: 'Que no se olvide: los que ejercen la represión contra el pueblo no podrán mantenerse en pie'.
Por otra parte, según explicaron dos combatientes rebeldes, Ihab Ben Salim y Hamza Alwan, recién llegados a Trípoli del frente de Bani Walid, los milicianos se vieron obligados a retroceder después de haber entrado en la localidad, a 150 kilómetros al sureste de la capital, debido a la resistencia de las brigadas gadafistas. Las fuentes aseguraron que los soldados gadafistas emplearon bombas de racimo, proyectiles de mortero y numerosos francotiradores situados en dos puntos elevados de la zona e impidieron el avance.
En su lucha, los rebeldes covlieron a contar con el apoyo de la OTAN, cuyos aviones atacaron objetivos militares de las fuerzas gadafistas en las ciudades de Sebha y de Sirte.
'UNA LECCIÓN AL MUNDO'
Por otra parte, un día después de la visita oficial a Libia del presidente francés, Nicolas Sarkozy, y el primer ministro británico, David Cameron, el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, aterrizó en Trípoli y declaró que 'ningún Gobierno puede mantenerse mediante la fuerza y contra la voluntad del pueblo'.
Erdogan le dijo a una multitud de ciudadanos sirios que son 'los que demostraron a todo el mundo que ningún Gobierno puede mantenerse mediante la fuerza y contra la voluntad del pueblo'. Además, el primer ministro turco afirmó que los libios han enseñado a 'todo el mundo' lo que les espera a los que coaccionan a los ciudadanos.
El mandatario turco también se refiri al presidente de Siria, Bashar al Assad: 'Que no se olvide: los que ejercen la represión contra el pueblo no podrán mantenerse en pie'.
