Los dos equipos más goleadores de la liga se daban cita en Espiñedo. El Arenteiro, segundo, medía su potencial ante el equipo revelación de la temporada, el Ribadumia. Tras las derrotas de la semana pasada, ambos equipos llegaban con la cabeza puesta en los tres puntos para seguir mirando hacia arriba.
El partido comenzó con mucho ritmo buscando desde el primer momento la portería rival. El primero en golpear fue el Arenteiro, después de una dejada de Martín, Román ponía el 1-0 en el marcador de tiro cruzado.
Lejos de venirse abajo, el gol animó a los visitantes que se hicieron con la manija del partido y comenzaron a trenzar jugadas que inquietaban la portería defendida por Toño; fue en una de estas rápidas transiciones cuando el Ribadumia logró el empate por medio de Rubén. Acto seguido, sin tiempo para recuperarse, un centro desde la banda derecha fue rematado por Suso, que, de cabeza, marcaba el 1-2.
Cuando los locales esperaban el descanso para organizarse y tratar de darle la vuelta al partido llegó el tercero del Ribadumia; otra vez Rubén, que aprovechaba una indecisión de la defensa local y batía en el uno contra uno a Toño.
Así se llegó al descanso, con un Arenteiro desbordado por el fútbol de los visitantes, un Ribadumia que fue el mejor equipo que pasó por Espiñedo en lo que va de temporada, con un fútbol sencillo pero muy efectivo que desarboló la defensa de los verdes.
En los segundos cuarenta y cinco minutos los locales se fueron arriba pero con más corazón que cabeza, dejando muchos espacios atrás que el Ribadumia aprovechaba para salir a la contra. De esta forma los visitantes tuvieron varias ocasiones que pudieron hacer más abultada la victoria.
Incluso después de quedarse con un hombre menos por la expulsión de Segundo, el Ribadumia siguió con el dominio del balón y disfrutando sobre el césped, mientras que los locales nada podían hacer viendo como volaban tres puntos más de Espiñedo.
Segunda derrota consecutiva de los carballiñeses que parece que se desinflan y victoria importante para el Ribadumia que lo coloca en los puestos nobles de la clasificación.
Lejos de venirse abajo, el gol animó a los visitantes que se hicieron con la manija del partido y comenzaron a trenzar jugadas que inquietaban la portería defendida por Toño; fue en una de estas rápidas transiciones cuando el Ribadumia logró el empate por medio de Rubén. Acto seguido, sin tiempo para recuperarse, un centro desde la banda derecha fue rematado por Suso, que, de cabeza, marcaba el 1-2.
Cuando los locales esperaban el descanso para organizarse y tratar de darle la vuelta al partido llegó el tercero del Ribadumia; otra vez Rubén, que aprovechaba una indecisión de la defensa local y batía en el uno contra uno a Toño.
Así se llegó al descanso, con un Arenteiro desbordado por el fútbol de los visitantes, un Ribadumia que fue el mejor equipo que pasó por Espiñedo en lo que va de temporada, con un fútbol sencillo pero muy efectivo que desarboló la defensa de los verdes.
En los segundos cuarenta y cinco minutos los locales se fueron arriba pero con más corazón que cabeza, dejando muchos espacios atrás que el Ribadumia aprovechaba para salir a la contra. De esta forma los visitantes tuvieron varias ocasiones que pudieron hacer más abultada la victoria.
Incluso después de quedarse con un hombre menos por la expulsión de Segundo, el Ribadumia siguió con el dominio del balón y disfrutando sobre el césped, mientras que los locales nada podían hacer viendo como volaban tres puntos más de Espiñedo.
Segunda derrota consecutiva de los carballiñeses que parece que se desinflan y victoria importante para el Ribadumia que lo coloca en los puestos nobles de la clasificación.
