Un informe técnico alerta del riesgo de derrumbe del tejado de la iglesia de San Cosme, en el municipio de Irixo. Ya se desprendió una losa de piedra de 300 kilos y muchos feligreses acuden a los cultos a otra parroquia para evitar riesgos.
Los feligreses de la parroquia de San Cosme de Cusanca, en el municipio de Irixo, corren un serio peligro cada vez que acuden a su iglesia. Así lo constata el informe de un arquitecto, encargado por el Concello, debido al avanzado deterioro del tejado que amenaza con derrumbarse. La cubierta de esta iglesia de estilo barroco (siglo XVIII) se encuentra en un estado lamentable desde el año 2005, empeorando la situación con el paso del tiempo hasta el punto de desprenderse hace aproximadamente un año una gran losa de piedra de 300 kilos de peso, que no causó ninguna desgracia porque ocurrió de noche. No obstante, otras similares del alero del tejado están a punto de caer, según apunta el mencionado informe, amenazando la vida de quien se encuentre en el entorno. El alcalde Manuel Penedo presentaba ayer la correspondiente documentación en la Consellería de Cultura, tras el compromiso que adquirió en días pasados el responsable de este departamento autonómico, Roberto Varela, para subvencionar el proyecto. La inversión prevista es de 130.000 euros, que aportará en parte la Xunta, y para cuya ejecución el regidor espera también la colaboración del Obispado.
Con esta reforma, los aproximadamente 300 vecinos de esta parroquia, que está formada por 22 pueblos, ya no tendrán que acudir a los actos religiosos en la iglesia de Docampo, como muchos de ellos hacen por temor a un derrumbe. Asimismo, se erradicarán las goteras en el interior del edificio antes de que dañe la imágenes o causen otro tipo de perjuicios como temen los feligreses.
Con esta reforma, los aproximadamente 300 vecinos de esta parroquia, que está formada por 22 pueblos, ya no tendrán que acudir a los actos religiosos en la iglesia de Docampo, como muchos de ellos hacen por temor a un derrumbe. Asimismo, se erradicarán las goteras en el interior del edificio antes de que dañe la imágenes o causen otro tipo de perjuicios como temen los feligreses.
