Seis curas pasaron por la parroquia en 14 años y ahora pretenden que se quede un joven sacerdote

Los fieles de Garabás reclaman al Obispado un párroco estable para tener más misas

Los feligreses de Garabás, en Maside, han perdido la poca paciencia que les quedaba, tras 14 años sin poder contar con un párroco estable para atender los 14 pueblos que conforman esta parroquia. Están recogiendo firmas para presentar en el Obispado a fin de que nombre a un joven diácono, que será ordenado el 28 de junio. Los vecinos afirman que no pueden seguir manteniendo una situación que reduce los actos religiosos sólo a los domingos y se plantean no asistir a las misas como medida de protesta.
La práctica totalidad de los feligreses de la parroquia de Garabás, en Maside, que cuenta con una población de 490 habitantes, ha firmado un escrito mediante el que solicitan al Obispado que nombre párroco al diácono Juan Carlos Estévez Vázquez, tras su ordenación como sacerdote el próximo día 28 de este mes de junio.

Esta parroquia hace aproximadamente 14 años que se había manifestado contra el que por aquel entonces era su párroco. Los feligreses consideraron que el cura había faltado al respeto a la familia de una vecina cuyo fallecimiento había conmocionado a todo el municipio por su juventud. Su última voluntad había sido que no participasen más curas en su funeral que el propio párroco, y a éste no le había gustado su decisión. A partir de ahí se desató un conflicto que llevó a los feligreses a concentrarse cada domingo delante de la iglesia, sin asistir a misa, hasta que consiguieron el traslado del sacerdote.

Desde entonces, Garabás no ha podido contar nunca más con un párroco estable. A día ya pasaron por allí, y de forma provisional, hasta seis curas. Uno falleció, otros dos están enfermos y otros tienen demasiado trabajo en otras parroquias. En estos momentos, los 14 pueblos que conforman esta importante parroquia de Maside únicamente cuentan con un administrador, que es el párroco de Carballiño, Xosé Benito Sieiro.

Desde el pasado mes de octubre, el diácono Juan Carlos Estévez, de 26 años, natural de Palencia, aunque residente en Carballiño (su madre es de Leiro) presta aquellos servicios religiosos que le permite su condición hasta su próxima ordenación. Esta labor la alterna con Xosé Benito Sieiro, cada domingo.

Sin embargo, los vecinos no están conformes porque ‘ó non dispor dun párroco permanente hai moitas celebracións que non podemos ter nin tampouco as novenas porque só veñen os domingos’, apuntaba una vecina de la localidad.’Estamos recollendo as firmas que se levarán ó Obispado, e todo o mundo está dacordo para pedir que se quede este diácono’, manifestaba Antonio Álvarez, también vecino de Garabás.

Al respecto, algunos todavía recuerdan lo que había ocurrido hace 14 anos y, en ese sentido, señalaban que ‘¿por qué non podemos ter cura?, xa sabemos que hai poucos pero esta é unha parroquia moi grande, si non nos fan caso teremos que deixar outra vez de ir a misa os domingos’.

Dos autobuses para asistir a la ceremonia de ordenación

Un buen número de vecinos asistirá a la ceremonia de ordenación del diácono Juan Carlos Estévez, porque ‘estamos moi contentos con el e gustaríanos que se quedara en Garabás’, señalaba uno de los organizadores del viaje. Para ello, dispondrán de dos autobuses que trasladarán a los vecinos hasta Ourense.

Juan Carlos Estévez se mostró discreto en relación a la petición al Obispado que promueven los feligreses. No quiso hacer declaraciones, limitándose a decir que estaba a las órdenes del obispo.

Lo que sí está confirmado es que su primera misa la oficiará en Carballiño, al día siguiente de su ordenación, a las siete de la tarde en la iglesia de A Veracruz.

Mientras tanto, los promotores de la campaña de recogida de firmas prácticamente han concluido con la labor, ya que según aseguraron sólo falta por recoger los papeles en la localidad de Mundín, y poco más. Al mismo tiempo que confirmaron que la respuesta de toda la parroquia ha sido contundente y que todos los vecinos desean que se quede de forma permanente Juan Carlos Estévez.

El párroco de Carballiño, Xosé Benito Sieiro, manifestó que las reclamaciones de las parroquias no suelen condicionar habitualmente la decisión del Obispado.


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