La agrupación de Cáritas do Ribeiro constata un incremento importante de transeúntes, la mayoría inmigrantes que buscan empleo y que en Ribadavia reciben comida, alojamiento y un billete de autobús. En 2008, recibieron atención 517 personas.
La actividad de Cáritas Arciprestal do Ribeiro se centra en prestar ayuda a las familias de la comarca con dificultades económicas y, sobre todo, en la atención a los transeúntes, cuyo número ha experimentado un importante crecimiento en los últimos tres años. Cinco voluntarios colaboran en la labor desarrollada por tres sacerdotes de la zona desde hace aproximadamente cinco años.
De esta forma, a lo largo del 2008, Cáritas ayudó a un total de 517 transeúntes, la mayoría de ellos inmigrantes de diferentes países como Portugal o procedentes de Centroeuropa y Sudamérica, que buscan empleo desplazándose de un lugar a otro. Los responsables de la agrupación matizaron que si la media en anteriores años se aproximaba a las 300 personas atendidas, en 2007 ya se notaba el importante aumento hasta alcanzar las 440, a los que se sumaron este año 77.
Non sabemos moi ben cal é o motivo de que veñan tantos transeúntes a Ribadavia, pero supoñemos que se debe a que lles damos comida, habitación para dormir e billete de autobús para ir a Vigo ou a Ourense, apuntaba uno de los voluntarios.
Desde que funciona este servicio han desaparecido las personas que mendigaban unas monedas a las puertas de los supermercados o en cualquier calle del centro. Son os propios veciños de Ribadavia e dos pobos do entorno quen lles din onde teñen que ir para recibir axuda, añadieron.
En consecuencia, una gran parte del presupuesto anual de la agrupación, que es el resultado de las donaciones que realizan los feligreses el primer domingo de cada mes, se destina a abonar los gastos en tiendas de alimentación, en el restaurante y los ocasionados por pernoctar, además de los viajes. Los ingresos en 2008 ascendieron a 11.648 euros y los gastos fueron de 10.491 euros, de los que más de 8.000 se destinaron a los transeúntes y a pagar los alimentos de las 14 familias de la comarca beneficiarias.
Actividades
As axudas nunca son económicas, senón que o facemos mediante vales tanto para as familias de aquí como para os estranxeiros, e eles diríxense ó supermercado ou ó restaurante e incluso os utilizan para viaxar, indicaron los voluntarios.
A lo largo del año la agrupación trabaja en la recogida de ropa y alimentos, en su clasificación y posterior reparto. Asimismo, también se recaudaron fondos con la organización de un festival de Navidad.
Desde hace dos años, los transeúntes disponen de dos habitaciones en la casa parroquia para pasar la noche, que fueron acondicionadas por Cáritas.
En Carballiño
Otra agrupación referente es Cáritas de Carballiño, que centra sus esfuerzos en apoyar a las familias con dificultades económicas. El párroco José Benito Sieiro afirma que su número se ha duplicado en los dos últimos años, necesitando ayuda un total de 798 a lo largo del 2008 (con 242 miembros), de las que un 80% son inmigrantes que intentan encontrar una salida laboral en la villa del Arenteiro. El 20% restante son vecinos del entorno, que se han quedado sin empleo. Al respecto, apuntaba el sacerdote que muchas de las mujeres encuentran trabajo como cuidadoras de personas mayores. Al igual que en O Ribeiro, los donativos de los feligreses de la parroquia de Carballiño son esenciales para ayudar a esta gente, que sufre las consecuencias de la crisis económica.
De esta forma, a lo largo del 2008, Cáritas ayudó a un total de 517 transeúntes, la mayoría de ellos inmigrantes de diferentes países como Portugal o procedentes de Centroeuropa y Sudamérica, que buscan empleo desplazándose de un lugar a otro. Los responsables de la agrupación matizaron que si la media en anteriores años se aproximaba a las 300 personas atendidas, en 2007 ya se notaba el importante aumento hasta alcanzar las 440, a los que se sumaron este año 77.
Non sabemos moi ben cal é o motivo de que veñan tantos transeúntes a Ribadavia, pero supoñemos que se debe a que lles damos comida, habitación para dormir e billete de autobús para ir a Vigo ou a Ourense, apuntaba uno de los voluntarios.
Desde que funciona este servicio han desaparecido las personas que mendigaban unas monedas a las puertas de los supermercados o en cualquier calle del centro. Son os propios veciños de Ribadavia e dos pobos do entorno quen lles din onde teñen que ir para recibir axuda, añadieron.
En consecuencia, una gran parte del presupuesto anual de la agrupación, que es el resultado de las donaciones que realizan los feligreses el primer domingo de cada mes, se destina a abonar los gastos en tiendas de alimentación, en el restaurante y los ocasionados por pernoctar, además de los viajes. Los ingresos en 2008 ascendieron a 11.648 euros y los gastos fueron de 10.491 euros, de los que más de 8.000 se destinaron a los transeúntes y a pagar los alimentos de las 14 familias de la comarca beneficiarias.
Actividades
As axudas nunca son económicas, senón que o facemos mediante vales tanto para as familias de aquí como para os estranxeiros, e eles diríxense ó supermercado ou ó restaurante e incluso os utilizan para viaxar, indicaron los voluntarios.
A lo largo del año la agrupación trabaja en la recogida de ropa y alimentos, en su clasificación y posterior reparto. Asimismo, también se recaudaron fondos con la organización de un festival de Navidad.
Desde hace dos años, los transeúntes disponen de dos habitaciones en la casa parroquia para pasar la noche, que fueron acondicionadas por Cáritas.
En Carballiño
Otra agrupación referente es Cáritas de Carballiño, que centra sus esfuerzos en apoyar a las familias con dificultades económicas. El párroco José Benito Sieiro afirma que su número se ha duplicado en los dos últimos años, necesitando ayuda un total de 798 a lo largo del 2008 (con 242 miembros), de las que un 80% son inmigrantes que intentan encontrar una salida laboral en la villa del Arenteiro. El 20% restante son vecinos del entorno, que se han quedado sin empleo. Al respecto, apuntaba el sacerdote que muchas de las mujeres encuentran trabajo como cuidadoras de personas mayores. Al igual que en O Ribeiro, los donativos de los feligreses de la parroquia de Carballiño son esenciales para ayudar a esta gente, que sufre las consecuencias de la crisis económica.
