La Policía Local de Ribadavia investiga los destrozos del pasado martes en el recinto de la Feira do Viño. Aunque en un principio tanto los responsables del Concello como de la propia empresa propietaria de las carpas pensaron que el viento había arrancado 10 estructuras, las inspecciones de un técnico de la empresa 'Nuevo Diseño' y de los agentes de la Policía revelaron que un total de 12 cuerdas de sujeción presentaban cortes limpios, resultado de la utilización de un instrumento como un cuchillo o unas tijeras, al contrario del aspecto deshilachado que deberían tener en el caso de ser arrancadas por el viento.
En consecuencia, esta empresa ourensana presentaba ayer la correspondiente denuncia ante la Policía Local. La directora gerente, Montse Fernández, declaró que 'no sabemos si ha sido un sabotaje contra la empresa puesto que ya había acabado la feria, pero está claro que ha sido un acto intencionado porque tuvieron que utilizar una escalera para cortar las cuerdas a tres metros de altura'. Asimismo, los indicios apuntan a que tuvo que ser más de una persona porque fue una actuación que requirió bastante tiempo, según indicó la gerente. La empresa valora los desperfectos de las carpas entre los 70.000 y los 80.000 euros, a lo que hay que sumar los destrozos ocasionados en una lona, un vehículo, canalones y farolas, cuando dos de las estructuras fueron a parar a la céntrica calle Progreso.
El concejal de Turismo, José Prieto, coincidía con Montse Fernández, en que 'pudo ser una tragedia si llegara alcanzar a personas', añadiendo que 'podía haberlas matado, por eso creo que quien lo hizo no valoró el alcance de sus actos', insistía la gerente de la empresa.
Por ahora, aún no está claro el momento en que se produjeron los hechos, porque no hay testigos de los mismos. Pudo haber sido durante la noche del lunes o al mediodía del martes, mientras los operarios que desmontaban las carpas se fueron a comer y se producían las ráfagas de viento que desencadenaron los destrozos.
José Prieto declaró que en la Alameda en días pasados 'xa roubaron as barandillas do palco da música', por ese motivo, y dado que ahora se llevaron las cuerdas de las carpas, anunció que se reforzará la vigilancia en este entorno.
El concejal de Turismo, José Prieto, coincidía con Montse Fernández, en que 'pudo ser una tragedia si llegara alcanzar a personas', añadiendo que 'podía haberlas matado, por eso creo que quien lo hizo no valoró el alcance de sus actos', insistía la gerente de la empresa.
Por ahora, aún no está claro el momento en que se produjeron los hechos, porque no hay testigos de los mismos. Pudo haber sido durante la noche del lunes o al mediodía del martes, mientras los operarios que desmontaban las carpas se fueron a comer y se producían las ráfagas de viento que desencadenaron los destrozos.
José Prieto declaró que en la Alameda en días pasados 'xa roubaron as barandillas do palco da música', por ese motivo, y dado que ahora se llevaron las cuerdas de las carpas, anunció que se reforzará la vigilancia en este entorno.
