El Pazo de Toubes de la bodega Viña Costeira acogió ayer el XXVI Campeonato Gallego de Sumillers, clasificatorio para el de España que organiza la Unión de Asociaciones de España de Sumilleres, y que tendrá lugar en Madrid en el mes de abril, como paso previo a la competición mundial.
Los participantes compitieron en cuatro pruebas, una de ellas con la cata de tres vinos, uno de ellos inglés, de los que tuvieron que descubrir procedencia, variedad de uva y la zona, entre otras interrogantes; una segunda tuvo que ver con una serie de datos erróneos sobre los vinos, que debieron descartar; otra consistió en elegir vinos y destilados para distintos menús; y por último informar con detalle sobre un único producto.
El presidente de la Asociación Gallega de Sumillers, Juanjo Figueroa, confía en un resultado favorable en Madrid porque “hay muy buenos sumilleres en activo y una proyección de los que vienen muy grande”.
La competición estuvo muy reñida, y aunque normalmente se seleccionan los tres primeros, en esta ocasión han quedado cuatro por un empate a puntos. Así, quedaron clasificados: Tomás Ucha (Restaurante Berría Wine Bar de Madrid); en segundo lugar, Ismael López (Casa Solla de Poio); Marcos Eire (Árbore da Veira de A Coruña) y Pablo Juncal (Casa Vella de Vigo). La asociación eligió el Pazo de Toubes porque está en O Ribeiro, una de las zonas “con más potencial, historia y proyección”, apuntó.
