Entre enero y agosto de 2009, los expedientes de regulación de empleo afectaron a 1.259 ourensanos, frente a los 344 registrados durante todo el año pasado. El sindicato CIG considera que el precario tejido empresarial de la provincia está muy afectado por la crisis y que esta cifra aumentará en los próximos meses.
Los trabajadores afectados por expedientes de regulación de empleo (EREs) durante los ocho primeros meses de 2009 en Ourense cuadriplican a los registrados durante todo el año 2008, según los datos presentados ayer por el sindicato CIG. Así, entre enero y agosto sufrieron regulaciones laborales 1.259 trabajadores (pertenecientes a 38 empresas), de los que 1.159 casos fueron de suspensión temporal y 100 de rescisión de contrato. Durante el año pasado habían sido 344 los trabajadores afectados (240 de suspensión temporal y 104 de rescisión), en 27 EREs.
El secretario comarcal del sindicato, Etelvino Blanco, explica que la mayoría de empresas que presentan el ERE alegan una caída de producción y no causas económicas, con lo que quieren evitar que se analicen las cuentas de años anteriores, en los que tenían beneficios, lo que dificultaría que se aprobase el ERE.
La mayor parte de los EREs de 2009 se presentaron en la primera mitad del año, entre los que predominaban los del sector auxiliar de automoción, que ahora tiene mejores perspectivas de producción, pero no recuperó trabajadores. Además, indica que continuarán presentándose expedientes en los próximos meses.
Blanco puntualizó que, además, están aumentando las firmas que entran en concurso de acreedores (18 en el primer semestre de 2009), los cierres de pequeñas empresas y los despidos individuales, lo que coloca al precario tejido industrial de la provincia en una difícil situación.
El secretario comarcal del sindicato, Etelvino Blanco, explica que la mayoría de empresas que presentan el ERE alegan una caída de producción y no causas económicas, con lo que quieren evitar que se analicen las cuentas de años anteriores, en los que tenían beneficios, lo que dificultaría que se aprobase el ERE.
La mayor parte de los EREs de 2009 se presentaron en la primera mitad del año, entre los que predominaban los del sector auxiliar de automoción, que ahora tiene mejores perspectivas de producción, pero no recuperó trabajadores. Además, indica que continuarán presentándose expedientes en los próximos meses.
Blanco puntualizó que, además, están aumentando las firmas que entran en concurso de acreedores (18 en el primer semestre de 2009), los cierres de pequeñas empresas y los despidos individuales, lo que coloca al precario tejido industrial de la provincia en una difícil situación.
