Ayer volvían a subirse a un escenario los once integrantes de la Plataforma Independente de Teatro de Amoeiro (P.I.T.A.) tras pasar los “tempos máis duros” de la pandemia, como reconoce su responsable, Pilar Cruz, una de las más veteranas de esta formación que nació hace ya más de veinte años como una parte de la asociación de mulleres rurais As campiñas, aunque ya en esa asociación se hacían representaciones de teatro. Los últimos años han sido difíciles para esta agrupación de vecinos de Amoeiro, ya que las actuaciones se fueron reduciendo de forma considerable. Con todo, Pilar recuerda perfectamente actuaciones en el Teatro Principal o el Liceo, además de otros muchos concellos de la comarca de Ourense como Coles o Vilamarín.
Su día a día “é un cachondeo”. “Aquí non buscamos ser profesionais, o que queremos é ser unha forma de que a xente se entreteña”. Hay que tener en cuenta que la mayoría de sus integrantes trabaja y puede dedicar muy poco tiempo a los ensayos. “Ás veces enrabietámonos entre nós, pero somos todos moi amigos”, cuenta.
Cruz confiesa que tanto ella como otra de las veteranas, Anuncia, continúan actuando “para que non morra, porque sería unha mágoa moi grande”, y, aunque se confiesan cansadas, asegura que no se rendirán y que “continuaremos tendo ilusión por seguir”. “Nós estamos a insistir todo o día para que nos substitúan, pero á rapazada de agora non se lle dá polo teatro, polo menos aquí”, lamenta. Ayer por la tarde, en la Casa da Cultura de Amoeiro, estos once amigos representaron dos obras diferentes. La primera de ellas, “Noivos por internet”, contaba la historia de una pareja que se veía por primera vez en persona tras meses hablando a través del teléfono móvil.
Por su parte, la segunda, “Un amor ben outonal”, trataba de una señora mayor que, en sus vacaciones, se enamora de un hombre de 38 años. “Todo nun tono de humor, porque o que a nós nos interesa é pasalo ben e que a xente o pase ben con nós”, explica. Así, un salón de actos lleno rió a carcajadas con las peripecias de los protagonistas de las obras de una agrupación de teatro singular, y que cumple una función mucho más que artística, que es la de crear comunidad.
Además, antes de la actuación teatral, la Banda de gaitas de Amoeiro dio un pequeño concierto como apetivo a las dos obras representadas.
