Antonio Álvarez: "Me encontré una plantilla un poco huérfana y superada por los acontecimientos"

El nuevo Comisario de Ourense, Antonio Álvarez Valencia se presentó ayer públicamente a pesar de que su toma de posesión no será hasta septiembre. Aunque es  ourensano de nacimiento, ejerció su vida profesional principalmente en la comisaría del centro de Barcelona y en Tarragona. Reconoció que al legar a su nuevo puesto se encontró con un equipo "con la moral muy baja" pero que está intentando modificar esa actitud.

El comisario aseveró que sus dos valores son "la transparencia y la seguridad ciudadana" ya que en la Policía Nacional "estamos al servicio de la ciudadanía". En lo que se refiere al caso de las pistolas robadas en el armero de la Policía ourensana, Álvarez Valencia señaló que que es un caso "propio de un guión de cine negro", y aseguró que asuntos internos y el juez siguen investigando. Otro caso abierto al que se enfrenta el nuevo comisario es el del asesinato de Socorro Pérez. El responsable de la Comisaría comentó que "las teorías apuntan a que fue un delito de carácter sexual y descartamos la teoría de robo con fuerza". Las investigaciones siguen abiertas y el caso "se está trabajando con la unidad de Madrid", explicó. 

En cuanto a la ciudad de Ourense, el nuevo comisario la considera una ciudad segura: "Los robos con fuerza han bajado considerablemente y en los últimos seis meses no se ha contabilizado ningún delito de carácter sexual".

En cuanto a sus planes para la Ourense, Antonio Álvarez tiene claro que va a combatir el tráfico de estupefacientes a pequeña escala, es decir, "las drogas que se venden en puntos negros de la ciudad a los consumidores", aunque asegura que el cuadro de personal es bastante reducido y considera que hace falta una ampliación. 

Confirmó que le quedan dos años para jubilarse y adelantó: "Espero ser yo el que cierre los dos grandes casos abiertos antes de retirarme".