Un mes y medio después del acuerdo alcanzado entre la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) y la Consellería de Sanidade, que puso fin a la huelga convocada por el sindicato, el área sanitaria de Ourense, Verín y Valdeorras ha recuperado casi al 100% la actividad cancelada por el parón de trabajadores. La gerencia apunta a la planificación asistencial como herramienta clave, y asegura que “o reducido número de procedementos” que faltan se completarán “este mesmo mes de xuño”.
La huelga de facultativos, que contó con un amplio seguimiento en numerosos servicios del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), provocó la cancelación en todo el área sanitaria de un total de 217 intervenciones quirúrgicas, 4.263 consultas externas y 707 pruebas diagnósticas. Pese a la corta duración de las movilizaciones -apenas semana y media-, las numerosas anulaciones obligaron a la gerencia a reordenar los servicios para poder dar respuesta a la población afectada, en un contexto marcado por las largas listas de espera en la provincia.
Un acuerdo polémico
El acuerdo alcanzado entre CESM y Sanidade, sin embargo, no convenció demasiado a la mayoría de médicos participantes en la huelga. El texto pactado incluía subidas salariales, así como revalorización de las guardias, pero no otras demandas, como la reducción de la carga asistencial o de las agendas en Atención Primaria. Los colegios de médicos gallegos (entre ellos, el de Ourense) señalaron la necesidad de seguir “luchando por mejorar” la situación de la sanidad pública gallega, y facultativos y residentes de toda la comunidad escribieron una carta quejándose del acuerdo, que “únicamente” logró mejoras salariales.
