La Xunta desplegó a principios de mes el Plan de Vialidade Invernal en la provincia, con un dispositivo de 102 profesionales, 1.935 toneladas de fundente y seis centros operativos que garantizarán la seguridad vial hasta el 30 de abril de 2021.
Así, la Administración autonómica dispone en Ourense de un dispositivo de 50 máquinas, entre las que se contabilizan camiones o esparcidores de sal, que atenderán los más de 1.000 kilómetros de carreteras de la Xunta en la provincia.
En el conjunto de Galicia, son en total 26 los centros operativos y más de 460 los profesionales que velarán por la seguridad de las carreteras autonómicas, y próximamente se unirán al Plan de Vialidad Invernal las provincias de A Coruña y Pontevedra, que a partir del día 15 de este mes contarán con el despliegue de medios materiales y humanos, activos ya en Ourense y Lugo, para facilitar la movilidad en los más de 5.500 kilómetros de titularidad de la Xunta.
Prevenir para circular
El objetivo principal de esta iniciativa es mejorar las condiciones de circulación en la red de carreteras de la comunidad, que se pueden ver en dificultades con la llegada del invierno y la presencia de fuertes lluvias, la formación de placas de hielo o la aparición de nieve. Este plan recoge medidas preventivas y actuaciones para anticiparse a los contratiempos que se puedan producir, y medidas paliativas para reforzar la seguridad viaria en situaciones meteorológicas adversas o desfavorables.
El área de estas acciones, a las que la Xunta destina alrededor de 50 millones de euros cada año para llevar a cabo tareas de conservación en las vías, comprende en Ourense zonas en Carballiño, Celanova, Xunqueira de Españedo, Verín, A Gudiña, A Rúa, Pobra de Trives y la propia ciudad.
