La incorporación de mejoras en los locales ha aplazado en seis meses los nuevos contratos

El Concello quiere impulsar la explotación de sus cafés

La zona verde que el Concello está construyendo en el entorno de La Molinera incorporará una pequeña cafetería que, además de realizar este servicio y contar con baños públicos, contribuirá a costear también el mantenimiento de los jardines. La junta de gobierno aprobó ya el proyecto de rehabilitación de un edificio en este entorno, a orillas del Barbaña, y la adjudicación de la obra, que costará 41.692 euros. Una vez reformado el inmueble, la adjudicataria de la explotación se encargará de la adecuación de los interiores.
Coincidiendo con la decisión de incorporar un nuevo local de hostelería, la Concejalía de Comercio intenta renovar las explotaciones que ya tiene en marcha. Aunque hace ya seis meses que publicó los pliegos de condiciones para adjudicar las cafeterías de la Alameda (dos) y el Jardín de O Posío, la situación continúa exactamente igual, a la espera de que a partir de la próxima semana se reactiven los procedimientos. La paralización de los procesos administrativos, que en ningún caso afecta a los locales (dado que continúan abiertos, explotados por las actuales concesionarias), se basa en la pretensión municipal de que se realizaran mejoras que no estaban contempladas en los pliegos iniciales, después de que se comprobara que 'nalgúns casos, as instalacións estaban mal, por exemplo, nos baños', dice Garza. Al margen de esta cuestión, y aunque todavía no ha salido a licitación, el departamento municipal estudia la posibilidad de sacar a concurso también la explotación de la cafetería del Parque Miño e incluso la que se encuentra en uno de los locales inferiores al parque de A Ponte, cerrada desde hace unos años.


CAMPO DE LA FERIA

En una situación parecida se encuentran los locales de hostelería del campo de la feria. Mientras que la adjudicación del restaurante (ubicado en la parte superior del recinto) podría demorarse hasta la aprobación definitiva del plan urbanístico que se prevé en esa zona de la ciudad y que registra ese uso hostelero, Comercio estudia la apertura en un espacio más reducido de tiempo de un pequeño bar cafetería en el recinto ferial, en uno de sus laterales, dado que el proyecto constructivo ya ha previsto ese uso.

En los primeros pliegos de condiciones para la adjudicación de sus cafeterías, el Concello establecía, entre otros requisitos, el pago de un canon anual de 9.760 euros (sin contar el IVA) por cada una de estas cafeterías y fijaba la obligatoriedad de que los establecimientos permanezcan abiertos en los horarios que fije el Concello, con un mínimo de seis días a la semana de apertura al público. El incumplimiento de este punto podría llevar a la rescisión del contrato. Asimismo, apuntaba una serie de condiciones de salubridad y atención al público para la adjudicación del servicio.

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