La media de delitos por cada 1.000 habitantes se sitúa en 23, cuando en el resto del país está en 44
Antonio Álvarez Valencia recordó ayer durante su intervención que es la última fiesta al frente de la Comisaría ourensana, dado que pasa a la jubilación en diciembre. Así, aprovechó el acto para hacer balance de la criminalidad en la ciudad en el último año, durante el que, según dijo, fueron desarticulados ocho puntos negros de venta de sustancias estupefacientes en el casco urbano. La tasa de criminalidad es de 23 delitos por cada 1.000 habitantes cuando la media española está en el 44 por cada millar de personas. Felicitó a los agentes por su eficaz actuación en los casos Mercadona (un hombre disparó una escopeta), la Romántica (detenido un guardia Civil por amenazas) y "Mazaira" (el intento de secuestro de la mujer de un abogado y su hijo). También fue desarticulada una red de trata de nigerianas que las explotaba sexualmente a través del método del budú.
Recordó que la Unidad de Familia y Atención a la Mujer presta protección a 159 mujeres maltratadas y recordó las investigaciones de los casos de Socorro Fernández y las desapariciones de María Belén Rodríguez y Elias Carrera. "Seguimos recopilando datos e investigando", aseguró.
