Salón de actos, dos grandes bibliotecas, un mesón para unir a los intelectuales, una biblioteca-café o una sala de investigación y, en un futuro, una residencia para artistas. La Fundación Casdemiro, que gestiona todo el legado del historiador ourensano Xulio Francisco Ogando, está a punto de adquirir un inmueble sito en la Praza do Trigo de la ciudad, al lado de las dependencias de la Tenencia de Alcaldía, para fijar ahí la sede central de la entidad. Empezará a funcionar en un plazo máximo de un año.
El amplio y variado legado que dejó el historiador ourensano Xulio Francisco Ogando estará a disposición de los investigadores en un céntrico edificio, en el casco histórico ourensano. La Fundación Casdemiro, que gestiona todos sus bienes y que en actualidad tiene su sede en la calle Peña Trevinca, está a punto de formalizar el contrato de compra de un inmueble de varias alturas en la Praza do Trigo, al lado de las dependencias de la Tenencia de Alcaldía, para establecer en él, y ya de forma definitiva, la sede de la entidad, zanjando así una de las grandes cuestiones en las que venía trabajando la fundación desde su constitución.
Según ha podido saber este periódico de fuentes cercanas a la operación, las nuevas dependencias estarán en funcionamiento en un plazo máximo de un año.
Funcionalidad
El inmueble, al que se le ha retirado ya el tejado para iniciar su rehabilitación y adecuación a la nueva funcionalidad, se plantea como un punto de encuentro para intelectuales y centro de difusión de la actividad cultural. En su interior contará con un gran mesón y una sala concebida como la casa del pintor, escultor y artista en la parte de abajo, así como una biblioteca-café. Pero el edificio da para mucho más y, repartidos entre las diferentes plantas, acogerá también un salón de actos, dos grandes bibliotecas, una sala de investigación, una emisora de radio con tintes culturales y, previsiblemente aunque más a largo plazo, también se convertirá en una residencia para artistas.
El inmueble en que trabaja actualmente la Fundación Casdemiro es propiedad de Xulio Francisco Ogando, que lo cedió expresamente para uso de la entidad. En ella se encuentran trabajando ocho personas, que se encargan de catalogar los fondos del historiador que, entre su amplio legado, cuenta con ejemplares del siglo XVI. La nueva sede de la entidad, la que tendrá en la céntrica Praza do Trigo, responde claramente a los ideales con los que trabaja la Fundación Casdemiro-Xulio Francisco Ogando Váz quez desde sus comienzos y que están orientados a liderar, con dinero propio, el movimiento de fundaciones de Ourense.
Entre los proyectos de la mencionada entidad cultural está también el de un balneario, todavía en el aire.
Según ha podido saber este periódico de fuentes cercanas a la operación, las nuevas dependencias estarán en funcionamiento en un plazo máximo de un año.
Funcionalidad
El inmueble, al que se le ha retirado ya el tejado para iniciar su rehabilitación y adecuación a la nueva funcionalidad, se plantea como un punto de encuentro para intelectuales y centro de difusión de la actividad cultural. En su interior contará con un gran mesón y una sala concebida como la casa del pintor, escultor y artista en la parte de abajo, así como una biblioteca-café. Pero el edificio da para mucho más y, repartidos entre las diferentes plantas, acogerá también un salón de actos, dos grandes bibliotecas, una sala de investigación, una emisora de radio con tintes culturales y, previsiblemente aunque más a largo plazo, también se convertirá en una residencia para artistas.
El inmueble en que trabaja actualmente la Fundación Casdemiro es propiedad de Xulio Francisco Ogando, que lo cedió expresamente para uso de la entidad. En ella se encuentran trabajando ocho personas, que se encargan de catalogar los fondos del historiador que, entre su amplio legado, cuenta con ejemplares del siglo XVI. La nueva sede de la entidad, la que tendrá en la céntrica Praza do Trigo, responde claramente a los ideales con los que trabaja la Fundación Casdemiro-Xulio Francisco Ogando Váz quez desde sus comienzos y que están orientados a liderar, con dinero propio, el movimiento de fundaciones de Ourense.
Entre los proyectos de la mencionada entidad cultural está también el de un balneario, todavía en el aire.
