Un taller de empleo permitió realizar mejoras en los recursos termales
El trabajo llevado a cabo por las 40 personas participantes en el taller de empleo "Ourense Termal", que fue clausurado ayer, acerca la posibilidad de explotar comercialmente el entorno del Centro de Interpretación de As Burgas, con apartamentos turísticos, bar-cafetería, tienda y punto de información. Así lo confirmó el alcalde de la ciudad, Jesús Vázquez, durante el acto de entrega de diplomas.
"Foi un traballo fundamental para sacar, próximamente, a concesión da explotación dos apartamentos turísticos, que contan grazas ó voso traballo cun renovado acceso e escaleiras no edificio da rúa do Baño", indicó el regidor, que estuvo acompañado por los concejales de Termalismo e Infraestructuras, Jorge Pumar y José Araújo; el director xeral de Orientación e Promoción, Alfonso Marnotes; y la delegada territorial de la Xunta, Marisol Díaz.
Jesús Vázquez explicó los trabajos que los participantes del taller acometieron durante seis meses, tanto en As Burgas como en las orillas del río Miño. "Colocáronse 200 novos metros de canaleta para a recollida de augas, renováronse varandas, puxéronse cinco novos bancos, 15 monolitos con instruccións para o bo uso das instalacións termais, melloramos o aparcamento e acondicionamos as taquillas", indicó el alcalde, que reivindicó también los trabajos realizados para facilitar el acceso en bicicleta a las zonas termales.
Por su parte, Alfonso Marnotes puso en valor programas como el taller "Ourense Termal", que mezclan formación y un contrato de trabajo, lo que ayuda a incrementar la inserción en el mercado de trabajo de los participantes.
En este taller, participaron alumnos de entre 23 y 59 años, con un presupuesto de 233.000 euros, de los que la Xunta aportó 179.134 y el Concello 51.223.
Marnotes recordó que ya está abierta la convocatoria de ayudas para nuevos talleres. En las bases, se incluyen diferentes novedades, como, por ejemplo, una mayor valoración de la relación de la iniciativa con el tejido empresarial de la zona donde tenga lugar la actividad y las posibilidades de inserción, así como el incremento de su duración hasta los nueve meses. Se dará preferencia a beneficiarios de la Renta de Integración Social, mujeres, víctimas de violencia de género, parados de larga duración, mayores de 45 años o personas con baja cualificación.
Por último, el director xeral destacó que "a formación é a chave que pode abrir oportunidades de cara ó futuro no eido laboral", al tiempo que aseguró que "ninguén coñece mellor que os concellos as demandas e necesidades dos cidadáns, as obrs e servizos máis necesarios e as oportunidades de emprego de cada zona".
