El Festival internacional de teatro de Ourense puso ayer el punto y final a su segunda edición. Fueron nueve días de interpretación con 12 compañías invitadas, las últimas Matarile teatro y Tascabile di Bérgamo, que actuaron ayer.
Después de nueve días como referente teatral ourensano, la segunda edición del Fito bajó ayer el telón por fin de temporada. Primero los italianos de Teatro Tascabile di Bérgamo con su espectáculo de calle Vals y posteriormente la compañía gallega Matarile Teatro con su obra Animales artificiales despidieron esta cita con la interpretación, que desde el pasado 24 de octubre recorrió la ciudad con sesiones en el Auditorio municipal, en el Campus, el Teatro Principal y en la céntrica calle del Paseo.
El Festival internacional de teatro de Ourense fue el evento escogido por Matarile para poner fin a la gira que desde principios de 2008 le ha llevado por distintos puntos de la geografía española con su montaje Animales artificiales. Y si un espectáculo gallego, el del grupo ourensano Os perqtores de Seixalbo, sirvió para poner en marcha el engranaje de esta segunda edición del Fito, la obra de Matarile hizo lo propio pero como broche final, siendo el último grupo en subirse al escenario. Entre ambos espectáculos transcurrió el festival, nueve días de dedicación exclusiva al arte de la interpretación por los que pasaron una docena de compañías procedentes de seis países diferentes, que dejaron en los escenarios ourensanos un total de 15 representaciones.
No pudo ser al aire libre por culpa de la lluvia, pero Tascabile di Bérgamo hizo suyo el pabellón cubierto de Barrocás y aprovechó el último día del Fito para ofrecer su segunda actua ción. Vals, la historia de una niña inquieta que siente inquietud por el mundo adulto durante un baile, puso en el escenario el poderío que los zancos tienen como accesorio en el teatro concebido para espacios abiertos. Teatro combinado con danza y música para ofrecer otra versión del amplio abanico teatral que la programación del festival trajo a Ourense, completado con actividades paralelas como un curso de Creatividade do corporal.
El Festival internacional de teatro de Ourense fue el evento escogido por Matarile para poner fin a la gira que desde principios de 2008 le ha llevado por distintos puntos de la geografía española con su montaje Animales artificiales. Y si un espectáculo gallego, el del grupo ourensano Os perqtores de Seixalbo, sirvió para poner en marcha el engranaje de esta segunda edición del Fito, la obra de Matarile hizo lo propio pero como broche final, siendo el último grupo en subirse al escenario. Entre ambos espectáculos transcurrió el festival, nueve días de dedicación exclusiva al arte de la interpretación por los que pasaron una docena de compañías procedentes de seis países diferentes, que dejaron en los escenarios ourensanos un total de 15 representaciones.
No pudo ser al aire libre por culpa de la lluvia, pero Tascabile di Bérgamo hizo suyo el pabellón cubierto de Barrocás y aprovechó el último día del Fito para ofrecer su segunda actua ción. Vals, la historia de una niña inquieta que siente inquietud por el mundo adulto durante un baile, puso en el escenario el poderío que los zancos tienen como accesorio en el teatro concebido para espacios abiertos. Teatro combinado con danza y música para ofrecer otra versión del amplio abanico teatral que la programación del festival trajo a Ourense, completado con actividades paralelas como un curso de Creatividade do corporal.
