El teniente coronel aseguró en el día de la patrona que los agentes no se olvidan de aquellos que 'perturban la tranquilidad'

La Guardia Civil se marca como meta la reducción de los robos en el rural

Novo Colldefors, tercero por la izquierda, acompañado por el elenco de autoridades asistente al acto. (Foto: MIGUEL ANGEL)
El repunte de los delitos contra la propiedad, especialmente los robos con fuerza y asaltos en viviendas habitadas del rural, preocupa a la Guardia Civil.
De hecho, el teniente coronel de la Comandancia de Ourense, Manuel Javier Novo Colldefors, no lo pasó por alto en su discurso ante las autoridades presentes en la festividad de la patrona del Cuerpo, la Virgen del Pilar. 'Por su incidencia, estamos especialmente sensibilizados con los delitos cometidos contra la propiedad', aseguró. Para remachar a renglón seguido las prioridades del instituto armado: 'Impedir que nadie se apropie de lo ajeno y que mucho menos lo hagan violentando la intimidad de sus hogares y , en su caso, poner a los autores a disposición de la justicia'. En su intervención, se mostró firme y expeditivo: 'Tengan la seguridad que nos olvidamos de ninguno de los que perturban su tranquilidad; es una lucha diaria y permanente en la que nunca bajamos la guardia y que perseveraremos en nuestro esfuerzo para ofrecerles los mejores resultados'.

Los niveles de seguridad son altos en la provincia , valoró Novo Colldefors, pese a que también reconoció ante los periodistas que 'este año está siendo especialmente durillo' ya que los delitos contra la propiedad son ahora mismo el principal problema en su hoja de servicios. Así, el primer semestre del año se cerró con un aumento del 28% de los robos con fuerza en la provincia, aunque en el caso de los que se producen en domicilios el incremento se situó en un 54%. No obstante, el teniente coronel aclaró que la Guardia Civil está reforzando la vigilancia en lugares 'sensibles' y en aquellas horas donde se han detectado más incidencias.

El acto de ayer, que comenzó con una misa en la catedral para a continuación desplazarse la comitiva al cuartel de Santa Mariña, en donde se procedió a la entrega de condecoraciones, discursos y la tradicional ofrenda a los caídos .

Muchos de los protagonistas de la fiesta, los propios agentes de la Guardia Civil, acudieron en compañía de sus familias, incluidos los niños. Estos se mezclaron con las autoridades invitadas, entre las que no faltó personal de la judicatura, compañeros de las fuerzas de seguridad y políticos.

El subdelegado del Gobierno, Roberto Castro, glosó las virtudes del instituto armado no sólo por sus cometidos sino por la percepción social del mismo ya que, según dijo, 'es una institución muy cercana, querida y enormemente valorada'.

Castro resaltó valores como el 'honor, el amor al servicio, el compañerismo, la lealtad, el espíritu de sacrificio y la disciplina', destacando, sobre todo, 'el profundo amor a España y al servicio'. Esta reflexión le sirvió para introducir su condena al atentado que vivió el concello de Melón en la madrugada del lunes. 'Solamente en la búsqueda de las palabras se encuentran las ideas y éstas se corroboran con sugerencias constructivas, diálogo reposado y respeto mutuo entre los miembros que configuran el colectivo social', destacó.

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