La junta de gobierno local del Concello de Ourense aprobó en su reunión de ayer la ubicación del proyecto de huerto educativo en Mariñamansa, con lo que finalmente no tendrá lugar su emplazamiento en el parque Angelita Paradela, tal y como estaba planificado con anterioridad. De este modo, el Concello atendió la petición de los vecinos del entorno de este parque, que habían solicitado el cambio de situación.
El pasado 25 de mayo, el alcalde, Francisco Rodríguez, ya había anunciado a los presidentes de las asociaciones de vecinos de Barrocás y Os Rosais que el huerto se ubicaría en una parcela correspondiente a una zona verde local y que está situada entre la Avenida de Zamora y el paseo del río Barbaña, al lado del 'Parque da Vida'.
Con esta aprobación, se crearán en la ciudad huertos que contarán con tres partes diferenciadas: la zona de huertos escolares, la zona de huertos intergeneracionales y la zona común.
Los huertos escolares mostrarán a los niños el funcionamiento de las huertas, con cultivos que harán los propios escolares en sus diferentes bancales, y contará además con una subzona en la que se cultivarán diferentes especies de plantas aromáticas.
Los huertos intergeneracionales consistirán en una veintena de parcelas, repartidas entre aquellos ciudadanos que las soliciten, que estarán unidas por un camino y delimitadas por traviesas.
Finalmente, el huerto educativo contará con una zona común formada por un espacio de acogida que dispondrá de una sala de recepción, oficinas, aseos y una sala de exposiciones y reuniones donde se darán las charlas a los niños. Además, el resto del huerto tendrá una zona ajardinada con la misma estructura en bancales que el resto del espacio. Ésta está diseñada con la idea de formar un conjunto paisajístico huerto-jardín.
Este proyecto de agricultura urbana sostenible cuenta con un presupuesto de 247.900 euros.
Con esta aprobación, se crearán en la ciudad huertos que contarán con tres partes diferenciadas: la zona de huertos escolares, la zona de huertos intergeneracionales y la zona común.
Los huertos escolares mostrarán a los niños el funcionamiento de las huertas, con cultivos que harán los propios escolares en sus diferentes bancales, y contará además con una subzona en la que se cultivarán diferentes especies de plantas aromáticas.
Los huertos intergeneracionales consistirán en una veintena de parcelas, repartidas entre aquellos ciudadanos que las soliciten, que estarán unidas por un camino y delimitadas por traviesas.
Finalmente, el huerto educativo contará con una zona común formada por un espacio de acogida que dispondrá de una sala de recepción, oficinas, aseos y una sala de exposiciones y reuniones donde se darán las charlas a los niños. Además, el resto del huerto tendrá una zona ajardinada con la misma estructura en bancales que el resto del espacio. Ésta está diseñada con la idea de formar un conjunto paisajístico huerto-jardín.
Este proyecto de agricultura urbana sostenible cuenta con un presupuesto de 247.900 euros.
