Una colilla mal apagada en la papelera del despacho de Comercio de UGT pudo ser la causante del fuego que fue controlado por los propios trabajadores antes de la llegada de los bomberos

Un incendio obliga a desalojar la sede sindical de San Lázaro

Estado en que quedó el despacho de Comercio de UGT.
Las cerca de 100 personas que a media mañana de ayer se encontraban trabajando en la sede sindical del Parque de San Lázaro tuvieron que ser desalojadas por un pequeño incendio en un despacho de la sede de laUGT, en el primer piso del inmueble.
El fuego comenzó alrededor de las 12.00 horas en una papelera, presuntamente por una colilla de cigarro mal apagada, en el despacho número 17 de la Unión General de Trabajadores, y que corresponde al área de Comercio, Hostelería, Turismo y Juegos.

En palabras de José Luis Fernández Celis, secretario xeral de UGT en la provincia, afortunadamente el incendio no registró víctimas ni tampoco daños materiales, puesto que ningún documento se quemó a causa del percance.

Al lugar del suceso acudieron los bomberos de la ciudad, sin embargo sólo pudieron certificar que el fuego estaba completamente controlado.

El despacho donde se produjo el incendio tenía una ventana que daba al patio interior del edificio de San Lázaro, por los que fueron los funcionarios y los empleados del Centro Comercial Aberto, dos pisos más arriba, los que vieron el humo salir de la ventana del despacho, dando aviso a las fuerzas de seguridad.

El secretario de UGT aclaró que como la puerta del despacho estaba cerrada 'no nos dimos cuenta del incendio hasta unos minutos después y fue gracias a que el humo salía de la ventana por lo que la situación no pasó a mayores'.

De hecho, el funcionario que apagó el incendio con uno de los extinguidores del inmueble fue Francisco Álvarez, presidente del Comite de Ecuourense.

Tras hacerse con el extintor, Álvarez se dirigió a un trastero de la sede sindical que da al patio interior del edificio y desde la ventana apagó el incendio.

'No quisimos entrar al despacho por la puerta ya que era peligroso abrirla, además si el fuego era muy fuerte podría haber causado alguna víctima', aseguró el secretario de UGT.

Aunque el incidente no pasó a mayores, el humo del incendio podía respirarse desde la planta baja del edificio. De hecho, las paredes y los muebles del despacho donde comenzó el fuego se tiñeron completamente de negro y gris, provocado por el humo y por el agente espumógeno e hídrico de la carga del extintor.

Los funcionarios de la sede sindical y decenas de curiosos se congregaron en el Parque de San Lázaro hasta que los bomberos se retiraron. Incluso alguno de los presentes recriminó la actitud de los sindicalistas, tras conocer los rumores de que una colilla había causado el incendio, ya que 'en los edificios públicos está prohibido fumar'.

Te puede interesar