Los cinco detenidos prestaron declaración ayer en el Juzgado de Instrucción de Trives, que fue el encargado de coordinar la operación. Llegaron a las instalaciones judiciales pasadas las nueve de la mañana en un furgón de la Guardia Civil desde la Comandancia ourensana y a las diez de la noche aún continuaban declarando ante la jueza.
El presunto cabecilla y dueño del taller, Santos A.G. , según pudo saber este periódico, negó durante el tenso y largo interrogatorio los hechos que se le imputan, asegurando que todas las indemnizaciones que había percibido en los últimos años por siniestros de vehículos habían sido reclamadas legalmente. El industrial se negó a declarar ante la Guardia Civil, alegando que su actividad económica era totalmente legal.
Su esposa, secretaria y los dos trabajadores sí testificaron en el cuartel de Santa Mariña y al igual que ayer en el Juzgado de Trives negaron que tuvieran nada que ver con ninguna trama para percibir compensaciones de compañías aseguradoras, alegando que lo único que hacían era tramitar los partes que le presentaban los clientes y sus responsables. Es más, aseguraron que la denuncia que presentaron a mediados del pasado mes de agosto por el robo de un vehículo mediante el método del 'alunizaje' no fue una simulación, sino verdadera.
Los cinco mantuvieron sus argumentos aunque, ante las pruebas que presentaron los investigadores, cayeron, según pudo saber este periódico, en múltiples contradicciones. La Guardia Civil mantiene la operación abierta y no descarta nuevas detenciones.
Su esposa, secretaria y los dos trabajadores sí testificaron en el cuartel de Santa Mariña y al igual que ayer en el Juzgado de Trives negaron que tuvieran nada que ver con ninguna trama para percibir compensaciones de compañías aseguradoras, alegando que lo único que hacían era tramitar los partes que le presentaban los clientes y sus responsables. Es más, aseguraron que la denuncia que presentaron a mediados del pasado mes de agosto por el robo de un vehículo mediante el método del 'alunizaje' no fue una simulación, sino verdadera.
Los cinco mantuvieron sus argumentos aunque, ante las pruebas que presentaron los investigadores, cayeron, según pudo saber este periódico, en múltiples contradicciones. La Guardia Civil mantiene la operación abierta y no descarta nuevas detenciones.
