La droga estaba en dos invernaderos de Tamallancos y un casa de Piñor
Tras tres horas de juicio, la jueza del Penal 1 aplazó al 6 de noviembre la vista oral por el mayor alijo de marihuana incautado en la provincia: 1.300 kilogramos valorados en 1.379.300 euros. La fiscal acusa a Carlos M.G. (61 años), su hijo Paul Joseph M. (31), nacido en EE.UU., y el armenio Artyom B. (29) de un delito contra la salud pública, delito por el que reclama cuatro años y dos meses de prisión para el primero y multa de dos millones de euros, con dos meses de arresto sustitutorio en caso de impago. También reclama prisión para los otros dos (tres años y tres meses), pero interesa que sea sustituida por la expulsión de España por un periodo de seis años ya que son extranjeros y estaban en Ourense de forma irregular.
Los acusados se negaron a contestar las preguntas de la fiscal mientras que los letrados de la defensa, como cuestión previa, plantearon la nulidad de las actuaciones en base a un registro de la Guardia Civil, a su juicio, ilegal.
Los registros en lo que aparecieron esa ingente cantidad de marihuana se realizaron en la vivienda de Vilariño, en Piñor, en la que vivía Carlos M.G. y dos invernaderos ubicado en una finca de 8.700 metros de Tamallancos (Vilamarín) que estaba cerrada con valla metálica.
La fiscal sostiene que los tres acusados se pusieron de acuerdos para comprar el terreno por 35.000 euros. Los invernaderos, tal como detalló la Guardia Civil, estaban dotados de riego por goteo, ventiladores en el techo y una instalación eléctrica para que rodas las labores de cultivo se pudieran efectuar de forma automática desde cuadros eléctricos. También utilizaban abono líquido para lograr un crecimiento mayor de las plantas.
La operación se desarrolló a finales de agosto de 2012 con los consiguientes registros. En la casa de Piñor, también aparecieron plantas colgadas sobre el cableado del techo así como ventiladores de secado en el suelo, humidificadores , una máquina picadora-trituradora, 270 macetas y casi 2.000 euros en efectivo.
Durante la fase de instrucción, Artyom B., reconoció que Paul Joseph M. y él se conocieron en la playa de Gandía y que le ofreció trabajo en Ourense para realizar labores de carga y descarga. De hecho, llegó a precisar que en la vivienda de Piñor descargó 20 sacos pero que desconocía que había en su interior.
Sin embargo, la Guardia Civil sostiene que en el momento en que lo trasladaban al cuartel manifestó de forma espontánea: "Vais a alucinar con lo que hay en la casa, en la vida habéis visto tanta maría junta; hay unos 20 sacos que no puede una persona con ellos".
