El 5 de octubre de 1999 fue el último día en que fue visto con vida el ourensano Guillermo Collarte. Diez años después, dos juicios, uno en Ourense por amenazas y otro en Portugal por su desaparición, buscan aportar luz sobre el suceso.
Hoy se cumplen diez años de la desaparición del empresario ourensano Guillermo Collarte. Su pista se perdió el 5 de octubre de 1999 cuando visitaba unas obras con sus socios portugueses en Valença do Miño.
Una década después, tras una investigación ardua y silenciosa propiciada por la tenacidad de su familia, dos juicios tratarán de arrojar luz sobre este suceso. La hija del empresario, Berta Collarte, confirma que el 20 de noviembre está señalado el juicio, en el Juzgado de lo Penal número 1 de Ourense, contra José L.R. (agente inmobiliario y ex concejal portugués de 65 años, que este fin de semana se declaraba estupefacto por lo que considera una acusación errónea, según recogía el diario Jornal de Notícias), y Vítor Manuel D.P.B. (ciudadano luso actualmente en prisión por el atraco a un banco y con múltiples antecedentes penales). Serán juzgados por un presunto delito de amenazas a la hija y los nietos de Guillermo Collarte.
Ambos están también imputados por la Procuradoría (Fiscalía) de Valença por el presunto secuestro y desaparición del empresario ourensano. Junto a ellos se sentarán en el banquillo de los acusados portugués dos socios de Collarte, José Gerardo T.A. y Luis S.L, ambos empresarios de la provincia de Pontevedra y, junto a José L.R, las últimas tres personas que lo vieron con vida. Además, el 20 de octubre está previsto que la Justicia portuguesa resuelva un recurso (debate instructório) presentado por Vítor Manuel D.P.B., el único imputado en prisión, por otro delito, tras lo que será señalado el juicio, que será de carácter mixto (con jueces y jurado popular).
La hija del empresario desaparecido, Berta Collarte, reconoce que los dos juicios que se celebrarán en Portugal y en España significan que el trabajo de estos años no ha sido inútil, aunque hubo momentos en que parecía no haber ninguna luz. Que se haga justicia es el principal objetivo de la familia del empresario, aunque su hija indica que me gustaría apelar a esa gente con mala entraña que sabe qué le pasó a mi padre que nos diga donde está. Sólo le pido a Dios la suficiente serenidad para acatar la decisión de la justicia y que me permita darle cristiana sepultura.
Sea cual sea el veredicto, la familia Collarte exige que paguen los culpables, ya que si alguno de los imputados no lo es, tampoco queremos fastidiarle la vida nadie. Diez años después del inicio del infierno de esta familia -tal y como define a este período Berta Collarte- el final del proceso penal parece estar al alcance de la mano. A pesar del tiempo transcurrido, la familia no cesa de agradecer el apoyo mostrado por toda la ciudad y por la gente en la calle. Que no se haya olvidado ha sido lo más importante para arrojar luz, relata la hija del empresario.
Una década después, tras una investigación ardua y silenciosa propiciada por la tenacidad de su familia, dos juicios tratarán de arrojar luz sobre este suceso. La hija del empresario, Berta Collarte, confirma que el 20 de noviembre está señalado el juicio, en el Juzgado de lo Penal número 1 de Ourense, contra José L.R. (agente inmobiliario y ex concejal portugués de 65 años, que este fin de semana se declaraba estupefacto por lo que considera una acusación errónea, según recogía el diario Jornal de Notícias), y Vítor Manuel D.P.B. (ciudadano luso actualmente en prisión por el atraco a un banco y con múltiples antecedentes penales). Serán juzgados por un presunto delito de amenazas a la hija y los nietos de Guillermo Collarte.
Ambos están también imputados por la Procuradoría (Fiscalía) de Valença por el presunto secuestro y desaparición del empresario ourensano. Junto a ellos se sentarán en el banquillo de los acusados portugués dos socios de Collarte, José Gerardo T.A. y Luis S.L, ambos empresarios de la provincia de Pontevedra y, junto a José L.R, las últimas tres personas que lo vieron con vida. Además, el 20 de octubre está previsto que la Justicia portuguesa resuelva un recurso (debate instructório) presentado por Vítor Manuel D.P.B., el único imputado en prisión, por otro delito, tras lo que será señalado el juicio, que será de carácter mixto (con jueces y jurado popular).
La hija del empresario desaparecido, Berta Collarte, reconoce que los dos juicios que se celebrarán en Portugal y en España significan que el trabajo de estos años no ha sido inútil, aunque hubo momentos en que parecía no haber ninguna luz. Que se haga justicia es el principal objetivo de la familia del empresario, aunque su hija indica que me gustaría apelar a esa gente con mala entraña que sabe qué le pasó a mi padre que nos diga donde está. Sólo le pido a Dios la suficiente serenidad para acatar la decisión de la justicia y que me permita darle cristiana sepultura.
Sea cual sea el veredicto, la familia Collarte exige que paguen los culpables, ya que si alguno de los imputados no lo es, tampoco queremos fastidiarle la vida nadie. Diez años después del inicio del infierno de esta familia -tal y como define a este período Berta Collarte- el final del proceso penal parece estar al alcance de la mano. A pesar del tiempo transcurrido, la familia no cesa de agradecer el apoyo mostrado por toda la ciudad y por la gente en la calle. Que no se haya olvidado ha sido lo más importante para arrojar luz, relata la hija del empresario.
