La fiscal solicita tres años de prisión para un hombre acusado de maltratar a su hija y, de forma habitual, a su mujer. Las dos se negaron ayer a declarar en el juicio contra él.
La mujer y la hija de un acusado de maltratarlas se acogieron ayer a su derecho a no declarar contra él en el juicio, que tuvo lugar en el Penal número 2 de Ourense. Aun así, la fiscal mantuvo su petición inicial de un total de tres años de prisión como presunto autor de un delito de maltrato no habitual a su hija y de un delito de maltrato psíquico habitual a su mujer.
En lo que se refiere a la hija, los hechos que le atribuye la fiscal a Álvaro A.G. ocurrieron en noviembre de 2006. La hija volvía al domicilio familiar, en Avión, y el acusado se acercó por detrás y, después de pedirle la hija las llaves de casa, él supuestamente se abalanzó sobre ella, logrando ésta liberarse y cayendo el hombre por las escaleras. Fue entonces cuando, según la acusación pública, el acusado se levantó del suelo, sacó una navaja y se abalanzó otra vez sobre la hija, cortándole una manga del jersey con la navaja. Cuando ella se refugió en la vivienda y aguantaba con su cuerpo la puerta de casa para impedir que entrara el padre, él, presuntamente, le decía ahorita la mato. Al final, la madre consiguió desarmar al acusado.
Con respecto a la esposa, la fiscal acusa al imputado de que desde hace unos ocho años y de forma reiterada, supuestamente se comporta de forma agresiva con ella y le dice que si lo denuncia la mata. Además de la pena de prisión, la fiscal reclama también para el acusado cinco años de alejamiento de su mujer y su hija en caso de ser condenado.
En lo que se refiere a la hija, los hechos que le atribuye la fiscal a Álvaro A.G. ocurrieron en noviembre de 2006. La hija volvía al domicilio familiar, en Avión, y el acusado se acercó por detrás y, después de pedirle la hija las llaves de casa, él supuestamente se abalanzó sobre ella, logrando ésta liberarse y cayendo el hombre por las escaleras. Fue entonces cuando, según la acusación pública, el acusado se levantó del suelo, sacó una navaja y se abalanzó otra vez sobre la hija, cortándole una manga del jersey con la navaja. Cuando ella se refugió en la vivienda y aguantaba con su cuerpo la puerta de casa para impedir que entrara el padre, él, presuntamente, le decía ahorita la mato. Al final, la madre consiguió desarmar al acusado.
Con respecto a la esposa, la fiscal acusa al imputado de que desde hace unos ocho años y de forma reiterada, supuestamente se comporta de forma agresiva con ella y le dice que si lo denuncia la mata. Además de la pena de prisión, la fiscal reclama también para el acusado cinco años de alejamiento de su mujer y su hija en caso de ser condenado.
