El Juzgado de Instrucción número dos de Ourense tomará declaración el próximo lunes a dos facultativos del CHUO para esclarecer la muerte de Manuel Castro Otero, un edil socialista de Castrelo de Miño que falleció el 23 de septiembre de 2010 al poco de someterse a una colonoscopia en el mencionado centro hospitalario.
Ambos, el médico que atendió a la víctima y el jefe del área de Digestivo, comparecerán ante el juez que investiga la causa como testigos y no como imputados, después de que así lo solicitase ante la Audiencia de Ourense el abogado de la familia de la víctima. El tribunal provincial, tras citar el órgano de instrucción a los facultativos como imputados, dio la razón al letrado del fallecido, que alegaba que si comparecían de esta última manera podrían acogerse a su derecho a no declarar, mientras que como testigos estarían obligados a decir verdad.
La disyuntiva de si los médicos debían personarse ante el juez bajo uno u otro status jurídico demoró la toma de declaraciones durante meses. El magistrado que investiga el caso en aras de apreciar una posible negligencia médica tomará declaración a los dos médicos previsiblemente a las 12,30 y a las 12,45 horas. Según fuentes cercanas al caso, de apreciarse algún tipo de indicio delictivo, la vista del próximo día 9 tendría que suspenderse para volver citar a los facultativos nuevamente, aunque en este caso ya como imputados.
SEDANTE CONTAMINADO
Manuel Castro Otero acudió al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense en septiembre de 2010 para someterse a la citada prueba. A los pocos minutos de que le fuese inyectado por vía intravenosa Propofol (un anestésico) empezó a sufrir convulsiones y murió por un 'fracaso funcional murtiorgánico' debido a un 'choque séptico' (infección), según determinó la autopsia, que confirmó en su momento que la causa del óbito fue una bacteria que llegó a contaminar el anestésico que se le administró.
La disyuntiva de si los médicos debían personarse ante el juez bajo uno u otro status jurídico demoró la toma de declaraciones durante meses. El magistrado que investiga el caso en aras de apreciar una posible negligencia médica tomará declaración a los dos médicos previsiblemente a las 12,30 y a las 12,45 horas. Según fuentes cercanas al caso, de apreciarse algún tipo de indicio delictivo, la vista del próximo día 9 tendría que suspenderse para volver citar a los facultativos nuevamente, aunque en este caso ya como imputados.
SEDANTE CONTAMINADO
Manuel Castro Otero acudió al Complexo Hospitalario Universitario de Ourense en septiembre de 2010 para someterse a la citada prueba. A los pocos minutos de que le fuese inyectado por vía intravenosa Propofol (un anestésico) empezó a sufrir convulsiones y murió por un 'fracaso funcional murtiorgánico' debido a un 'choque séptico' (infección), según determinó la autopsia, que confirmó en su momento que la causa del óbito fue una bacteria que llegó a contaminar el anestésico que se le administró.
