Ourense se despierta al borde del fin de semana con la constatación de una realidad, la natalidad en la provincia está en mínimos históricos, lo que compromete seriamente el futuro. Cuatro fallecimientos por cada bebé que viene al mundo indican los datos.
Además, los que quedan parecen no llevarse muy bien entre ellos, tal y como sucede en Ordelles, en donde dos vecinos tienen atemorizados desde hace años a la localidad.
No es mucho más agradable trabajar y jugarse la vida por un euro al día, tal y como sucede con los brigadistas privados que intentan apagar los incendios de Ourense.
Y en deportes, Carlos Canal afrontará una nueva edición de la vuelta a España, en buen estado de forma y con la experiencia de haber corrido ya una grande.