Decepción.
Es sentimiento generalizado que se vivió ayer en el pueblo de O Castro (Viana do Bolo), según Juan González, portavoz vecinal, tras conocerse el fallo que condenó a una familia de cuatro miembros de O Castro que el Juzgado de lo Penal número dos enjuició durante el pasado mes de mayo. Entonces, en el Pazo de Xustiza tuvieron lugar tres vistas orales en las que comparecieron más de 30 testigos por las supuestas amenazas y coacciones que esta familia, formada por Adelina P. y Antonio P, además de sus dos hijos, José Antonio P. y María P., perpetró contra los habitantes de este pueblo. Por ello, sus vecinos remitieron a la Fiscalía una denuncia colectiva en agosto de 2008.
Aunque el fiscal pidió en el juicio tres años de prisión para cada uno de ellos y cinco de destierro, 'por atemorizar a los vecinos', finalmente, el juzgado, según este portavoz vecinal 'condenounos a pagar en conxunto uns 600 euros por faltas', aseguró Juan González. 'Unha pena irrisoria que non cubre nin os danos que causaron', añadió. Esta condena fue confirmada por uno de los letrados del caso, quien aseguró que el fallo, aunque no convence a los vecinos, es 'jurídicamente incuestionable'.
Aunque el fiscal pidió en el juicio tres años de prisión para cada uno de ellos y cinco de destierro, 'por atemorizar a los vecinos', finalmente, el juzgado, según este portavoz vecinal 'condenounos a pagar en conxunto uns 600 euros por faltas', aseguró Juan González. 'Unha pena irrisoria que non cubre nin os danos que causaron', añadió. Esta condena fue confirmada por uno de los letrados del caso, quien aseguró que el fallo, aunque no convence a los vecinos, es 'jurídicamente incuestionable'.
