Un agente de la Policía autonómica que estaba fuera de servicio, sorprendió a un hombre prendiendo fuego en una finca de la localidad ourensana de Seixalbo
Detenido el autor de un incendio cuando ya se encontraba prendiendo fuego en los alrededores de Seixalbo (Ourense). Según los vecinos, era media tarde cuando varios de ellos paseaban por la carretera que va de Seixalbo hacia el colegio y advirtieron un intenso humo un poco antes del campo de futbol. Justo en ese momento vieron cómo un agente de la Policía autonómica, que se estaba en la zona, no lo dudaba y salía corriendo hacia el monte en el que se estaba iniciando un incendio. "Flipé, porque iba paseando y de repente vi a un chico correr para detener al pirómano", asegura un testigo del suceso.
El agente, que no se encontraba de servicio, localizó en el lugar a un hombre, de mediana edad, que estaba ya prendiendo fuego en una zona de monte con mucho pino y con la supuesta intención de provocar un incendio.
Los hechos sucedieron en torno a las 20 horas de la tarde del miércoles, en una tarde calurosa, aunque sin un viento especialmente fuerte. Al lugar, una zona llena de árboles, se acercaron dos camiones de bomberos y dotaciones de agentes forestales.
Los vecinos aseguran que no vieron a más personas, que todo indica que este señor actuó solo y destacan que "el agente actuó rápido y lo detuvo él solo sin pensarlo dos veces".
Un policía autonómico fuera de servicio
Hay consenso en que estas conductas son criminales y deben ser perseguidas, pero lo cierto es que pocas veces se consigue detener al culpable o conocer los motivos reales que desembocan en el incendio intencionado.
Lo llamativo de esta operación ha sido cómo se ha desarrollado. El agente de la Policía autonómica no se encontraba de servicio, pero la rapidez en la actuación permitió que el presunto delincuente fuera sorprendido a tiempo, posteriormente detenido y trasladado a la Comisaría de As Lagoas, en donde ha pasado la noche a la espera de pasar este jueves a disposición judicial y prestar declaración.
Los vecinos destacan lo sorprendente de la detención, "una detención de este tipo, interceptando al delincuente en el momento exacto en el que está intentando provocar un incendio forestal, es una actuación muy poco frecuente", aseguran.
Dificultad para identificar a los pirómanos
Habitualmente, la dificultad de probar este tipo de delitos contra el Medio Ambiente obliga a la Justicia a condenar a los acusados con penas leves cuando se les imputan delitos relacionados con los incendios forestales. A esto se suma que suele ser muy difícil identificar a los pirómanos porque no suelen ser vistos por testigos o también por ser encubiertos por los vecinos, en algunos casos.
Las penas que se imponen por estos delitos suelen ser reducidas, salvo cuando se prueba un peligro directo para la vida de las personas, unas penas que, en este caso, pueden llegar a 20 años de cárcel.
Dotaciones
El incendio afectó a 0,05 hectáreas de arbolada, en una jornada con un índice alto de riesgo por fuegos. En total actuaron 2 agentes, 3 brigadas, 1 motobomba, así como 3 efectivos y otra motobomba más de los bomberos de Ourense.
