Detecta un fuerte incremento del negocio de esta droga por una "mayor permisividad social"
Los casi siete kilos de hachís incautados la pasada semana por el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría a dos ourensanos que, según los agentes, lo traían desde Marruecos para traficar a mediana escala no es algo anecdótico. A lo largo de estos nueve meses del año, ya van 32 kilos en la ciudad, lo que convierte a 2015 como el periodo más fecundo en cuanto aprehensiones de los últimos 10 años (en 2014 -otro buen año- fueron 20 kilos y en 2013, siete, por ejemplo).
Todas "estas aprehensiones son un claro reflejo de los hábitos de consumo en la sociedad o a una mayor permisividad de la sociedad, directa o indirecta", aseguran fuentes policiales. De hecho, los derivados del cannabis -añaden- son las drogas más consumida en Ourense, sólo por detrás de sustancias legales como el alcohol, el tabaco o los hipnóticos. De hecho, hoy en día es la sustancia ilegal con menos reproche social.
La Policía alerta que estos datos tienen una segunda lectura: los derivados del cannabis ya igualan a la cocaína como droga que más beneficios proporciona a los narcotraficantes que operan en Ourense. Sólo en la ciudad, la resina de hachís, a seis euros el gramo, y la marihuana incautadas hasta finales de septiembre -2.572 gramos a cinco euros la dosis-, eleva a 207.216 euros los beneficios como mínimo.
La cocaína aprehendida fue de 3.537 gramos. Teniendo en cuenta que el precio del gramo está en 60 euros, con un pureza del 30%, -y 35.000 euros el kilo-, la cuantía económica supone, al menos, 212.220 euros (aumenta si es dosis). El volumen económico de la heroína requisada por la Policía Nacional, cuyas incautaciones fueron testimoniales -6,60 gramos- equivale a 369 euros . Su valor en la calle ronda los 56 euros y en 32.000 euros por kilo. La pureza del gramo oscila el 30%, mientras que la del kilo, el 40%.
Los agentes especializados en drogas advierten que en estos últimos años la demanda de hachís y marihuana se incrementó por la crisis, detectándose un trasvase del consumo de cocaína al de cannabis.
Las estadísticas sanitarias a nivel nacional recogen que alrededor del 10% de la población consumió en alguna ocasión cannabis -hachís o marihuana- , seguida a muy larga distancia de la cocaína (alrededor del 2%), que es la segunda sustancia estupefaciente de la lista.
Sin olvidar que en los últimos cinco años se constató una auténtica proliferación de pequeñas plantaciones de marihuana, según recoge la memoria de la Fiscalía de Ourense en 2013, en base a informes policiales. Se detectaron en zonas de difícil acceso o terreno colindantes a viviendas, a modo de huerta, o bien en espacios con cerramientos plásticos . El clima (calor y humedad), la orografía y una gran extensión rural hacen que junto a la crisis económica los productores del autoconsumo se multipliquen.
Precisamente, en estos días la Guardia Civil ha reforzado la vigilancia en los concellos limítrofes a la ciudad coincidiendo con la época de recolección de la marihuana.
