Aurelio Gómez Villar acusa al alcalde de Ourense de esconderse ante el conflicto de los bares especiales. El edil del PP en Ourense echa de menos que Francisco Rodríguez convoque al órgano mediador que ya solicitó el pasado 15 de mayo y reiteró en el pleno de junio.
El conflicto de los locales y bares especiales sigue en pie en la ciudad porque el alcalde no tiene voluntad de resolverlo y el concejal responsable, Antonio Rodríguez Penín, se esconde, señala Aurelio Gómez Villar, concejal del PP en Ourense, que recuerda que existe un instrumento para resolver este tipo de problemas en un marco de convivencia. Este no es otro que el órgano de mediación creado al amparo de la ordenanza muni cipal sobre protección contra ruidos y vibraciones, que entró en vigor en junio de 2002.
Gómez Villar recuerda que el grupo municipal popular solicitó por escrito que este órgano fuese convocado por el alcalde el pasado 15 de mayo, petición que fue reiterada en el pleno del pasado 6 de junio y todavía seguimos esperando, matiza el edil. Concluye diciendo que lo que sí es cierto es que la solución no pasa por tener en el orden del día de las juntas de gobierno de las últimas diez semanas dictámenes de cierre de pubs sin licencia y dejarlas sobre la mesa para eludir la responsabilidad de hacer cumplir la legislación vigente, advirtiendo Gómez Villar que lo que hace falta para resolver los conflictos es voluntad, diálogo y diligencia, tres características que no encontraremos en el concejal responsable.
Gómez Villar recuerda que el grupo municipal popular solicitó por escrito que este órgano fuese convocado por el alcalde el pasado 15 de mayo, petición que fue reiterada en el pleno del pasado 6 de junio y todavía seguimos esperando, matiza el edil. Concluye diciendo que lo que sí es cierto es que la solución no pasa por tener en el orden del día de las juntas de gobierno de las últimas diez semanas dictámenes de cierre de pubs sin licencia y dejarlas sobre la mesa para eludir la responsabilidad de hacer cumplir la legislación vigente, advirtiendo Gómez Villar que lo que hace falta para resolver los conflictos es voluntad, diálogo y diligencia, tres características que no encontraremos en el concejal responsable.
