Francisco Rodríguez y 18 alumnos inauguran los coloquios que promueven el Campus y La Región

El presidente de la CEO señala que aun en tiempos de crisis hay ‘oportunidades para los proyectos bien fundamentados’

Con una charla de café no es posible solucionar la crisis económica; sin embargo, se pueden analizar con detalle los factores empresariales y financieros que la rodean, reflexionando sobre las soluciones viables y adaptadas a un entorno social más específico, en este caso el de la provincia.
Bajo esta premisa, 18 alumnos de la Facultad de Ciencias Empresariales del Campus de Ourense se reunieron ayer en la cafetería de la Biblioteca universitaria, para participar en la primera sesión de los ‘cafés de trabajo’, promovidos por la Universidad de Vigo, con el apoyo de La Región y el objetivo de ofrecer a los estudiantes una forma amena, y con testimonios de primera mano, de conocer el entorno socioeconómico de la provincia, guiados por profesionales de relevancia.

La primera sesión de esta iniciativa, pionera en el Campus al tener valor curricular en los créditos prácticos de la asignatura ‘Desarrollo local y regional’, corrió a cargo del empresario Francisco Rodríguez, presidente de la Confederación de Empresarios de Ourense (CEO) y gerente de la empresa de construcción Proyecon. En el coloquio también participaron el decano de Ciencias Empresariales, José Carlos Yáñez; el profesor titular de Economía Aplicada, Santiago Lago, promotor y coordinador de la iniciativa, y Xosé Pastoriza, director de La Región.

La charla se desarrolló de forma amena y cercana entre ponente y alumnos, quienes pudieron expresar desde el primer minuto sus dudas, obteniendo clarificadoras respuestas de Rodríguez, quien, pese a dibujar un panorama económico poco optimista, aseguró que se mantienen ‘oportunidades tremendas para los proyectos bien fundamentados’.

Fueron muchos los temas que se tocaron en las dos horas que duró el café-coloquio, desde las soluciones para superar el déficit empresarial en la provincia, hasta las líneas en la que debería trabajar el nuevo Gobierno gallego, la obligación de crear productos de I+D+I, la crisis del ladrillo y de la obra residencial, las consecuencias del déficit del Estado o la conveniencia o no, planteada por alguno de los participantes, de que la banca y la empresa reorienten sus objetivos para modular y dimensionar sus beneficios en tiempos de crisis. En este sentido, Rodríguez manifestó que la búsqueda de beneficios debe ser planteada como un medio y no como un fin en sí mismo.

‘La caída de la construcción en Ourense fue brutal’

La creación de productos innovadores y con valores añadidos o la necesidad de alejar la especulación en el futuro del sector inmobiliario fueron algunos consejos que el presidente de la CEO, Francisco Rodríguez, recomendó a los estudiantes.

El encargado de presentar al ponente fue el profesor Santiago Lago, quien destacó al empresario Francisco Rodríguez ‘por demostrar siempre una gran inquietud por trasladar sus ideas ante el resto de la sociedad’, motivo por el que Lago aseguró que ‘si Rodríguez no fuera empresario sería un gran profesor universitario’. Halago al que el empresario, con agradecimiento pero con sentido del humor, respondió que ‘como maestro sería una especie de Míster Bean universitario’, rompiendo así el hielo entre los congregados en la charla. Después de haber arrancado risas entre los alumnos, Rodríguez comenzó su exposición haciendo un balance de la estructura socioeconómica de Ourense, que calificó de ‘descompensada’ pues, a su parecer, el mayor problema de la provincia es que ‘tenemos un déficit en el tejido industrial y empresarial, lo que provoca que buena parte de nuestros empleos e ingresos sean subsidiados’.

Otro de los temas de los que habló, a petición expresa del decano José Carlos Yáñez, fue sobre el papel que están teniendo las cajas de ahorro y los bancos ‘para evitar llegar al límite del endeudamiento del Estado’. Respecto a ello, Rodríguez fue tajante, ‘estoy a favor de las ayudas y del intervencionismo del Estado en el sector privado’ dijo, pero matizando que no se puede esperar que ‘en un país con 20% de paro, los bancos sigan reportando y buscando los mismos beneficios que obtuvieron en ejercicios anteriores, en años en los que no había crisis’.

También habló del declive de la obra residencial y de los nuevos modelos de gestión en la obra civil. En este sentido, aclaró que la caída de la construcción en Ourense ‘fue brutal, es decir, ‘de más del 60%’, aunque, matizó, ‘no es que tengamos que olvidarnos de la construcción como sector de mercado, lo que debemos es ser más precavidos e innovadores, pues tenemos que pensar que sólo un edificio genera 59 empleos directos e indirectos, relacionados con varios sectores, que van desde el granito hasta las nuevas tecnologías’.

En cuanto a la posible deslocalización de las empresas afectadas por la crisis, se mostró partidario de ejercer un mayor control sobre aquellas que se benefician de ayudas públicas en su entorno. Sólo ‘si, después de analizar don detalle la situación, no se llega a una solución sería viable estudiar el modelo de la deslocalización para sobrevivir’.



Te puede interesar