Como si nunca se hubiera roto el pacto de gobierno, PSOE y BNG votaron ayer unidos en el pleno del Concello de Ourense, tanto para aprobar como para rechazar mociones -excepto una-. Una circunstancia que no pasó desapercibida para la oposición, que tiene la sensación de que 'el BNG va a seguir gobernando pero desde el sótano (en referencia a la ubicación de la sede municipal del grupo)', según aseguró la concejala de Democracia Ourensana, Susana Gómez.
Así, el gobierno socialista no sólo respaldó la propuesta nacionalista de prorrogar el plazo de inspección técnica de los edificios construidos hasta 1911 sino que la amplió. Donde el BNG solicitaba una prórroga hasta el 31 de marzo de 2013, una enmienda socialista incrementó el plazo hasta el 31 de diciembre de ese año. Asimismo, los socialistas apoyaron también la propuesta nacionalista para habilitar ayudas para estas revisiones que, en los casos de más necesidad, podrían llegar a la mitad del importe de la inspección.
De esta forma, el gobierno local vuelve a incrementar el periodo para que los edificios centenarios pasen esta inspección técnica debido a que sólo el 15% de los alrededor de 4.000 inmuebles que debían realizarla han superado este trámite. La concejala de Urbanismo, Áurea Soto, negó que esta circunstancia se deba a la falta de información de los ciudadanos, como aseguraba la oposición, y la atribuyó a 'un problema de implementación'. En este sentido, la edila avanzó que estudiará la externalización de la gestión de estas inspecciones, que ya han realizado otros concellos, como el de Santiago.
SUBVENCIONES Y PERSONAL
Los nacionalistas apoyaron también la labor del grupo de gobierno al rechazar la moción en la que el PP recriminaba a los socialistas la pérdida de subvenciones y, más concretamente, de una de la Xunta para soterrar cables en Covadonga. La concejala Susana García considera que habría sido una 'irresponsabilidade non ter renunciado' a esa ayuda, ya que el gobierno no tenía tiempo para adjudicar legalmente la obra, tal y como defendió también la socialista Áurea Soto. Asimismo, PSOE y BNG rechazaron también la moción en la que el PP reclamaba unas nuevas bases de contratación para evitar 'interpretaciones torticeras y falta de transparencia' como las denominó el popular José Luis Valcarce. A este argumento, Carmen Rodríguez (PSOE) y Ximena González (BNG) contestaron echando en cara al PP su política de contratación 'a dedo'.
De esta forma, el gobierno local vuelve a incrementar el periodo para que los edificios centenarios pasen esta inspección técnica debido a que sólo el 15% de los alrededor de 4.000 inmuebles que debían realizarla han superado este trámite. La concejala de Urbanismo, Áurea Soto, negó que esta circunstancia se deba a la falta de información de los ciudadanos, como aseguraba la oposición, y la atribuyó a 'un problema de implementación'. En este sentido, la edila avanzó que estudiará la externalización de la gestión de estas inspecciones, que ya han realizado otros concellos, como el de Santiago.
SUBVENCIONES Y PERSONAL
Los nacionalistas apoyaron también la labor del grupo de gobierno al rechazar la moción en la que el PP recriminaba a los socialistas la pérdida de subvenciones y, más concretamente, de una de la Xunta para soterrar cables en Covadonga. La concejala Susana García considera que habría sido una 'irresponsabilidade non ter renunciado' a esa ayuda, ya que el gobierno no tenía tiempo para adjudicar legalmente la obra, tal y como defendió también la socialista Áurea Soto. Asimismo, PSOE y BNG rechazaron también la moción en la que el PP reclamaba unas nuevas bases de contratación para evitar 'interpretaciones torticeras y falta de transparencia' como las denominó el popular José Luis Valcarce. A este argumento, Carmen Rodríguez (PSOE) y Ximena González (BNG) contestaron echando en cara al PP su política de contratación 'a dedo'.
