El regato dos Muíños de Barbadás será un refugio contra el calor extremo

Xosé Carlos Valcárcel y Victoria Morenza en el entorno del regato dos Muíños
photo_camera Xosé Carlos Valcárcel y Victoria Morenza en el entorno del regato dos Muíños
El Concello de Barbadás acondicionará este espacio para atenuar el efecto de las altas temperaturas

Cada verano hace más calor en Ourense y las administraciones públicas asumen que deben hacer esfuerzos para adaptar las poblaciones a estos episodios de altas temperaturas, cada vez más frecuentes y que durante días rebasan los 40 grados centígrados. Así, siete municipios han tomado la delantera en la provincia y han recibido una subvención por parte de la Consellería de Medio Ambiente para elaborar un proyecto que incluya “tanto a reforma dun espazo público orientada á atenuación do efecto illa de calor urbana como unha campaña de sensibilización para implicar á cidadanía na loita contra as consecuencias do quecemento global”.

Uno de esos siete municipios punteros en la lucha contra el cambio climático es Barbadás, que acometerá esta actuación en el entorno del regato dos Muíños, zona urbana en la que se realizarán actuaciones de mitigación y adaptación a las nuevas condiciones climáticas. En el proyecto se establecen las siguientes intervenciones como la creación de una charca para anfibios, la plantación de cerezos autóctonos o la instalación de una pérgola para tener más zonas de sombra.

En cuanto a la segunda parte del programa, los talleres de concienciación, Barbadás los desarrollará en este nuevo espacio de charca para anfibios. Allí se instalará un panel informativo con contenidos orientados “á conservación da fauna e da flora autóctonas e á loita contra o cambio climático”. Además, también se impartirán charlas en los centros educativos.

Cuatro semanas

El presupuesto para desarrollar el proyecto son 20.000 euros y deberá estar listo en menos de un mes desde su adjudicación.  La concejala de Parques e Xardíns, Victoria Morenza, afirmó que este espacio será muy frecuentado no solo por los vecinos de Barbadás, sino también por los de la ciudad, que carece de este tipo de zonas.

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