Los agentes comunicarán a la Fiscalía su ubicación para que denuncie a los concellos

El Seprona halla 70 basureros en los montes de la provincia

Uno de los vertederos ilegales. Los agentes lo localizaron en los montes de A Gudiña.
Los vertederos de basura ilegales continúan proliferando por los montes de la provincia pese a que todos los municipios tienen implantado el servicio de recogida domiciliaria de basura.
Los agentes del servicio de protección a la naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) localizaron 70 basureros incontrolados durante una inspección que acaba de concluir y que afectó a toda la provincia. El informe será remitido a cada uno de los concellos afectados y a la Fiscalía para que abra diligencias por un delito contra el medio ambiente y, así, obligar a las entidades locales a clausurarlos.

La Guardia Civil declinó ayer concretar el lugar en que se encuentra cada uno de los basureros, amparándose en que aún no fue remitido el correspondiente informe a los alcaldes y al Ministerio Público, pero, según fuentes de la investigación, 70 de los 92 municipios que integran la provincia tienen un vertedero incontrolado de basura en su territorio.

Entre los restos que acumulan predominan las bolsas con restos de comida, pero también se puede encontrar colchones, neumáticos usados de coches, calzado inservible e incluso restos de ramos y coronas de flores utilizadas en funerales, además de todo tipo de cajas de cartón y plástico. 'La gente deposita todo tipo de restos, sin tener en cuenta el daño que pueden estar causando al entorno natural', afirmaron fuentes de la investigación.

El Seprona, durante la inspección, incluso localizó basureros en los hay chapa procedente de la carrocería de vehículos. 'En cualquier paraje, basta que un vecino tire una bolsa de basura para que a los pocos días se forme un basurero', explicaron las mismas fuentes.

Los vertederos que localizó el Seprona están en lugares apartados, aunque con fácil acceso. Los agentes iniciaron la inspección a principios de año tras descubrir un basurero en el parque natural del Xurés, en el que, además, había cráneos de animales salvajes disecados.

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