Los vecinos de la pequeña localidad de Carreira están en una nube ya que les cuesta asimilar lo ocurrido. Mantenían buena relación con José Antonio Arbor, soltero y prejubilado, y su madre, soltera y jubilada.

Un solterón prejubilado con buenas relaciones de vecindad

El cielo estaba grisáceo ayer en Carreira. La niebla matinal derivó en nublado y luego en una fina y persistente lluvia. Gris también era el semblante de los vecinos del pueblo y las lágrimas, contenidas en algunos casos, afloraban en otros, en un reflejo solidario y combinatorio de la realidad humana y meteorológica.
La mayoría no era capaz de asumir el terrible suceso y otros todavía comentaban, dentro de su deseada incertidumbre: 'Se aínda falei onte con Antonio e estaba ben'. Un primo de las víctimas, Juan Carlos González, tampoco daba crédito. 'Non sei o que pudo pasar, porque nunca tiveron problemas económicos ou discusións'. Otro familiar de los Arbor Rodríguez, Luis, recordó que 'Antonio traballou nunha empresa de madeira do polígono da Uceira, no Carballiño, e ó pechar solicitou a prexubilación'.

Mientras, un grupo de mujeres no lograba contener el llanto al llegar y conocer la situación, coincidiendo con la llegada del vehículo de la funeraria, el forense y el furgón que posteriormente se llevaría los cadáveres para la autopsia.

Así, María Fernández señalaba que 'parécenos imposible que o señor Antonio pudera facer una cousa así', y Manuel López recordó que 'estaban a restaurar unha casa vella aquí ó lado, para facer outra vivenda'. El alcalde de Maside, Celso Fernández, comentó que 'estou tan sorprendido como afectado', mientras conversaba con parientes de las víctimas. El ruido de los todoterreno que conducían los agentes de la Guardia Civil se confundía con los ladridos de los perros resguardados en un garaje anexo a la vivienda de los hechos.

La mayoría de las personas de Carreira consultadas, sin embargo, aseguró desconocer el detalle de que José Antonio Arbor se encontraba bajo tratamiento. Al respecto, José Castro indicó que 'creo que se levaba ben con todo o mundo e nunca o vin falar mal de ninguén, todo o contrario, era unha persoa moi boa'.

Por ello, la sorpresa de sus convecinos ante los fatídicos hechos resultó todavía mayor, con el añadido de que su madre no parecía padecer ningún tipo de enfermedad física o mental que pudiese originar una reacción adversa en su hijo.

En este sentido, los vecinos se llegaron a pregunta: 'Qué pasou pola cabeza de Antonio para facer unha cousa así?'. 'A resposta levouna él consigo', manifestó Lucía Pérez, otra vecina. Mientras, los investigadores intentarán recabar algún tipo de nuevos indicios a partir de los resultados de las autopsias. Una tarea difícil, la búsqueda de un móvil, pero los vecinos de Carrera aún confían en que su labor les traiga algo de consuelo.

Te puede interesar