UNIVERSIDAD

Treinta estudiantes podrán hacer el último curso de Medicina en Ourense

photo_camera El conselleiro de Educación, Román Rodríguez; Xosé Luis Armesto, rector de A Coruña; Juan Viaño, su homólogo de Santiago; la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera y el rector de la Universidad de Vigo, Salustiano Mato.

El preacuerdo firmado entre los rectores gallegos y la Xunta descentraliza formación práctica y teórica entre los hospitales gallegos 

Unos 30 estudiantes de Medicina finalizarán su carrera académica en Ourense durante el próximo curso; serán alumnos de sexto año, un período lectivo eminentemente práctico, que podrán realizar en cinco grandes servicios del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Esta es una de las consecuencias prácticas del preacuerdo formalizado ayer por los rectores de las tres universidades gallegas y las consellerías de Educación y Sanidade, que tenderá principalmente a que docentes de las universidades de Vigo y A Coruña puedan impartir docencia clínica a los estudiantes de último curso y a partir del tercer curso en grado, que realizan sus clases descentralizadas en los hospitales de A Coruña, Vigo, Ourense y Ferrol, y próximamente en Pontevedra.

El responsable del equipo de docencia del CHUO, Jesús García Mata, explicó ayer que la implantación del Plan Bolonia, que también convirtió la licenciatura de Medicina en grado, tiene mucho que ver en este acuerdo, que convierte el sexto año de especialidad en un curso práctico, que no se podrá impartir en el Hospital Clínico de Santiago por la saturación del centro si todos los estudiantes de Medicina rotasen por sus servicios durante un curso; además, recalcó, de que se "desaprovecharía la calidad clínica y docente" de otros hospitales gallegos, incluido el de Ourense.

Para ello, y de una forma coordinada con la Facultad de Medicina, cada hospital deberá adaptar sus recursos a lo que pida esta institución, aunque ya ha avanzado que los 30 alumnos, aproximadamente, con los que contará el CHUO, rotarán ese sexto año por los llamado, dice García Mata, cinco "troncos" comunes que conforman las áreas médica y quirúrgica, pediatría, psiquiatría y ginecología, a la que se añadirá medicina de familia. Para desarrollar el pna docente en el que se implicará el Complexo ourensano, se creó un grupo de trabajo con el Sergas y representantes de esas especialidades y se plantearon una serie de objetivos que gustaron a Santiago y que permitirán completar en Ourense la formación de futuros médicos.

Las clases, aunque especialmente prácticas, incluyen una parte teórica, con un índice de materias similar en toda Galicia. La evaluación final se medirá con aportaciones de la Facultad y los docentes de los hospitales, aunque la nota la pondrá Medicina. Eso sí, el trabajo obligatorio de fin de grado, coordinado con Santiago, se elaborará en Ourense, en el caso de los estudiantes que completen su formación en el CHUO.

Para García Mata, esta nueva responsabilidad -que se suma a las prácticas estivales de alumnado y a la docencia en algunas asignaturas- es un "reto, una ilusión y un desafío". La gerente del área sanitaria integrada de Ourense, Eloína Núñez, calificó el convenio "de extraordinaria noticia, perfectamente alineada con el Complexo" y las áreas de Verín y Valdeorras, "en donde tenemos 22 unidades docentes certificadas con una norma de calidad ISO", siendo la única gerencia integrada de España, dice, que más certificaciones de calidad tiene.

La medida cierra más de 10 años de controversia sobre la descentralización de la docencia de Medicina, que seguirá siendo un título exclusivo de Santiago. Pero habrá, además, profesores de las universidades de Vigo y A Coruña que podrán colaborar en la docencia clínica, incluso desde tercero de carrera, y serán los que impartan la práctica clínica y el rotatorio del último curso de grado.

Los rectores afirman que mejora la calidad y optimiza recursos

Hasta ahora, la única descentralización existente es que facultativos de los hospitales tenían acreditación docente para dar prácticas a los alumnos del último curso pero con este preacuerdo podrán ser tutores clínicos y formalizar el reconocimiento curricular en la carrera docente. Todo ello también podrá permitir el aumento de plazas en oferta en Medicina, al pasar de 350 a 360 el próximo curso.

Un Consello para la coordinación de la docencia clínica de Galicia y una comisión técnica de la Universidad de Santiago evaluarán el profesorado propuesto desde los hospitales y Medicina decidirá cada curso las áreas, materias y créditos en los que impartirá ese profesorado.

El rector de la Universidad de Vigo, Salustiano Mato, se congratuló del preacuerdo porque permitirá "dar músculo y proyección" al sistema universitario gallego".Asimismo, su homólogo de la Universidad de Santiago, Juan Viaño, donde se enmarca Medicina, destacó que este acuerdo es "muy grande" en relación con una titulación que suma ya "300 años" de historia, y que ahora se abre a la colaboración ante la "alta demanda", las necesidades formativas y los "tiempos nuevos", para "intentar aprovechar y optimizar los recursos".

El rector coruñés, Xosé Luis Armesto, valoró "el espíritu" de este acuerdo como una vía para "optimizar recursos" tanto de los centros hospitalarios como de los profesionales docentes para "mejorar la calidad" de la titulación. La conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, agradeció por su parte "este acto de generosidad y trabajo conjunto" que ha llevado a "un momento histórico" con el objetivo de "dar músculo" a la "única facultad" de Medicina de Galicia, gracias a la colaboración de los hospitales universitarios.

Asimismo, el responsable de la Consellería de Educación, Román Rodríguez, destacó que este principio de acuerdo demuestra que prevalecen "los intereses generales sobre los intereses particulares" y que "trabajando juntos Galicia es más fuerte".  

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