Después de unos años de gran actividad en el sector de construcción residencial, la crisis atravesada durante el año 2009 se agudizó en el 2010, según reflejan los datos de visado de viviendas que recoge el Ministerio de Fomento. Así se constata también por el bajo nivel de actividad que se observa a pie de calle, ya que las nuevas obras son escasas.
Así, y a falta de contabilizar los datos del pasado diciembre, en Ourense se han emitido visados para la construcción de 221 viviendas nuevas, lo que supone una caída del 70% con respecto al año pasado, en el que se habían emitido 637 licencias. Este volumen de actividad ya estaba muy por debajo de la media registrada desde el año 2000 al 2008, con una media de 2.900 viviendas proyectadas cada año. Con respecto a la etapa del bum, el descenso actual representa el 93%.
El descenso más drástico se ha producido en la ejecución de bloques de edificios, frente a las construcciones unifamiliares. Así, el número de viviendas contenidas en los nuevos bloques visados el año pasado fue de 100, frente a las 453 del año 2009. Una cifra ya alejada de la media de ejercicios anteriores, cuando se proyectaban anualmente más de 2.000 pisos en edificios de bloques.
Mientras, las viviendas unifamiliares experimentaron un descenso, aunque no tan fuerte como el de las anteriores. En concreto, durante el año pasado se visaron 121 casas, frente a las 184 del año anterior. La actividad en este segmento ya había caído notablemente en los años 2007 y 2008, aunque en ejercicios precedentes se estaban registrando más de 500 visados anuales.
Por el contrario, el ritmo de emisión de certificados de final de obra no refleja todavía el impacto de la crisis. Así, muchos promotores que tenían obras en marcha cuando comenzó la crisis fueron reduciendo el ritmo de ejecución, de ahí que todavía se estén terminado ahora numerosas viviendas. En concreto, en 2010 se finalizaron 1.795, cuando el año anterior habían sido 2.055 (una cifra ligeramente inferior a la de ejercicios precedentes).
OTRAS ÁREAS
El descenso de actividad afecta también a las rehabilitaciones. El año pasado se visaron 78 proyectos de ampliación o reforma, cuando en el año anterior habían sido 129. Este segmento ya había notado el descenso de actividad en la segunda mitad de la pasada década con respecto a la primera.
La crisis se deja notar también en edificaciones no residenciales (naves empresariales, agroganaderas o comerciales), según reflejan los datos de Fomento. En 2010 se visaron sólo siete edificios de este tipo, frente a 19 del año anterior. Este segmento también registró mayor actividad durante la primera mitad de la presente década, aunque ya en la segunda parte se había ralentizado.
El descenso más drástico se ha producido en la ejecución de bloques de edificios, frente a las construcciones unifamiliares. Así, el número de viviendas contenidas en los nuevos bloques visados el año pasado fue de 100, frente a las 453 del año 2009. Una cifra ya alejada de la media de ejercicios anteriores, cuando se proyectaban anualmente más de 2.000 pisos en edificios de bloques.
Mientras, las viviendas unifamiliares experimentaron un descenso, aunque no tan fuerte como el de las anteriores. En concreto, durante el año pasado se visaron 121 casas, frente a las 184 del año anterior. La actividad en este segmento ya había caído notablemente en los años 2007 y 2008, aunque en ejercicios precedentes se estaban registrando más de 500 visados anuales.
Por el contrario, el ritmo de emisión de certificados de final de obra no refleja todavía el impacto de la crisis. Así, muchos promotores que tenían obras en marcha cuando comenzó la crisis fueron reduciendo el ritmo de ejecución, de ahí que todavía se estén terminado ahora numerosas viviendas. En concreto, en 2010 se finalizaron 1.795, cuando el año anterior habían sido 2.055 (una cifra ligeramente inferior a la de ejercicios precedentes).
OTRAS ÁREAS
El descenso de actividad afecta también a las rehabilitaciones. El año pasado se visaron 78 proyectos de ampliación o reforma, cuando en el año anterior habían sido 129. Este segmento ya había notado el descenso de actividad en la segunda mitad de la pasada década con respecto a la primera.
La crisis se deja notar también en edificaciones no residenciales (naves empresariales, agroganaderas o comerciales), según reflejan los datos de Fomento. En 2010 se visaron sólo siete edificios de este tipo, frente a 19 del año anterior. Este segmento también registró mayor actividad durante la primera mitad de la presente década, aunque ya en la segunda parte se había ralentizado.
