El corrimiento de tierras se produjo en una zona de poco tránsito en la ladera de A Clamadoira
Un desprendimiento de tierras en la ladera del Santuario de la Virxe da Clamadoira, al pasar la rectoral de San Pedro de Muíños, movilizó ayer por la mañana a los servicios del Grupo de Emergencias Supramunicipal (GES) de Muíños. El corrimiento, del que por suerte no hubo que lamentar daños personales, afectó a unas tuberías de agua, una fuente y se llevó por delante un sendero peatonal. Así lo confirmaba el alcalde de la localidad, Plácido Álvarez Dobaño, que hoy se desplazará hasta la zona afectada para valorar los daños y analizar las posibilidades de restauración de los servicios afectados.
El corrimiento de tierras, el segundo en menos de un año en la misma zona, se produjo en la madrugada del lunes al martes en una zona de poco tránsito "posiblemente como consecuencia de las filtraciones de agua que se dan en el terreno", explicaba Álvarez Dobaño, que reconocía que "en esa zona el monte está en ladera y se suele acumular mucha agua. También es cierto que el sábado llovió muchísimo".
Como consecuencia de la avalancha se rompieron las tuberías de agua de un manantial con el que se riega el parque de Outeiro da Cela y el estanque municipal ubicado en las inmediaciones del embalse de As Conchas. "Lo que más nos preocupa es si se ha dañado la red de abastecimiento del pueblo de Muíños, tenemos dos manantiales, pero mañana tendremos que ver con mucha precaución si se ha cortado esta tubería", apuntaba el regidor, tras la modificación del paisaje en la ladera de A Clamadoira.
