Una forma diferente de tomar fruta y quizás pueda ser una receta ideal para incluir en los menús navideños
Una receta dulce que os animamos a probar. Es una receta con una elaboración divertida y entretenida, si tenéis peques en casa será un rato estupendo para disfrutar en familia. Una forma diferente de tomar fruta y quizás pueda ser una receta ideal para incluir en los menús navideños.
Ingredientes
3 huevos
1 vaso de leche evaporada
100 gr de harina de avena/integral
3 cucharadas de pasta de dátiles
1 cucharadita de canela
1 cucharadita de levadura química
Elaboración
Ponemos la calabaza (pelada y sin semillas) en un plato hondo y lo tapamos con film. Lo metemos en el microondas a potencia máxima durante 7-8 minutos para que se cueza en su propia agua.
Mientras se templa la calabaza, batimos enérgicamente en un bol, la pasta de dátiles y los huevos. Acto seguido añadimos la leche y la calabaza (fría), y trituramos o batimos hasta integrar los ingredientes a la masa anterior. Ahora añadimos la harina, la levadura, la canela y volvemos a batir todo.
Encendemos el horno a 180 grados. Cogemos un papel de hornear del tamaño del molde que utilicemos, y lo mojamos debajo del grifo, arrugándolo y empapándolo. Lo escurrimos bien y forramos el molde. Vertemos la masa en él y lo metemos en el horno durante 35-40 minutos. Sacamos, dejamos enfriar y lo degustamos.
