Ingredientes (para 5 personas)
- 300 gramos de almendra cruda (puede utilizarse molida y así ya no tendremos que moler)
- Una pieza de limón (para rallar)
- Un poco de canela molida
- 6 huevos
- 250 gramos de azúcar
- Un poco de azúcar glass (para espolvorear al final por encima de la tarta)
- Un poco de harina y mantequilla (para el molde de la tarta)
Elaboración
Si la almendra está sin moler, la molemos, si está ya molida, cogemos un cuenco o un bol que sea grande, ponemos los huevos y el azúcar, se bate muy bien con unas varillas hasta que blanqueen y agregamos la ralladura de limón. Vamos agregando después poco a poco la almendra molida y se mezcla todo bien con una varilla. Cuando la almendra está bien mezclada con la masa, le ponemos la canela en polvo y volvemos a mezclar bien.
Procuramos tener ya el horno precalentado a unos 180 grados, calor por arriba y por abajo. Cogemos un molde redondo desmontable y se unta con la mantequilla y espolvoreamos con la harina para que la tarta no se pegue al molde. Sobre este molde agregamos la masa de la tarta. Con la temperatura ya a 180 grados, ponemos la tarta a la mitad de la altura del horno, para que así la tarta quede bien cocida por arriba y por abajo. Horneamos sobre unos 30 minutos más o menos.
Si queremos saber si ya está bien de cocción la tarta, cogemos un pincho o un palillo largo y lo introducimos en la tarta, si lo sacamos limpio es que ya está la tarta en su punto.
Dejamos enfriar, desmontamos la tarta y ponemos en el centro el molde de la cruz de Santiago recortada. En un colador ponemos el azúcar glass y espolvoreamos bien sobre la tarta. Le sacamos el molde de la cruz, pasamos a una bandeja y ya la tenemos lista para comer.
Para acompañarla, viene bien vino dulce gallego o un espumoso de alguna denominación de origen gallega.
El secreto del chef
- Utilizad una almendra que sea de calidad.
-Darle el tiempo de cocción necesario, pero cuidando de que no se nos pegue en exceso al molde.