Xoanqui Ameixeiras: “Los gallegos no precisamos de ninguna fecha especial para disfrutar de una vieira"

Xoanqui Ameixeiras, durante la preparación de un plato en el canal autonómico.
photo_camera Xoanqui Ameixeiras, durante la preparación de un plato en el canal autonómico.
Xoanqui Ameixeiras (Fene, 1971) se asoma cada tarde de lunes a viernes desde el primer canal autonómico con una receta de cocina.

Xoanqui Ameixeiras (Fene, 1971) se asoma cada tarde de lunes a viernes desde el primer canal autonómico con una receta de cocina. Padre de tres niños (Gael y los mellizos Nuno y Zoe), “nombres de ascendencia celta”, puntualiza, residente en Vilagarcía desde los 22 años. “Me siento un hombre de mar”, subraya. Siete y media de la tarde de un jueves, acaba de recoger al mayor, que juega al baloncesto. Hijo de militar, concluye: “Los gallegos comemos muy bien”.

Leo que su inquietud por la cocina era algo inevitable.

Más que inquietud por la cocina, yo tenía inquietud por comer, por decirlo de forma coloquial por comer a Dios. Le echaba muchas horas, claro, si la familia tenía una taberna… De pequeños a todos nos ha encantado pintar, la cocina es lo mismo. Qué mejor que meterte en una cocina la típica tarde de lluvia. Cuando es una de ésas, aprovecho para preparar platos para toda la semana. Yo no soy de hacer un kilo de carne picada, si puedo hago cinco. En una cocina nunca te aburres. 

¿Le gustan las navidades?

Me encantan, como también el Entroido o la Semana Santa, más allá de que creo pero no soy un devoto. Todo lo que signifique fiesta me gusta.

Sobra decir quién va a cocinar en su casa el día 24, ¿no?

Sobra, me toca a mí. Pero he de decir que Marga, mi compañera, hace unos postres excelentes, unas galletas espectaculares.

¿Cómo va a ser la cena entonces?

En la de mis padres nunca faltó el bacalao ni el cordero, ni el marisco primero. Desde que nacieron los mellizos, la preparación comienza unos cuantos días antes. Ellos están locos por el sushi, yo la verdad es que no lo hago mucho. Igual después me piden una pizza. O unas chuletillas de cordero, quién sabe. A mí me da igual, yo como de todo. Cuando tienes niños, de lo que se trata es que disfruten. Estamos hablando de una cena íntima, otra cosa es que se reúnan treinta personas.

¿Y en la mía, qué me recomienda?

Le sugeriría un pescado al horno con la base de unas patatas panaderas. ¿Qué tal un mero? O un rodaballo. No manchas y comes bien, también es importante que el cocinero disfrute.

¿Xoanqui es más de pescado que de carne?

No necesariamente, me encanta el marisco, otra cosa es que hay que controlar el precio. Los gallegos no precisamos de ninguna fecha especial para disfrutar de una vieira al horno con su vino, su pan rallado, su jamón, su cebolla… O de unas almejas a la marinera. Pero también de una paletilla de cordero.

¿Y de postre?

Ahí sí que nada especial, me basta con una bandeja de garrapiñadas, de turrón. No soy de tartas ese día, sí de fruta fresca y helado. Una piña estaría bien.

¿Y el 25?

El día de Navidad solemos ir a casa de mi hermana, dice que no pero ya me lo tiene todo preparado (sonríe). La mesa de cocinar digo, no la otra. Estoy pensando en un arroz con lubrigante, en treinta minutos lo tienes. Eso sí, fregar le toca a otro.

La última, ¿comemos bien los gallegos?

Comemos muy bien, aunque podríamos comer muchísimo mejor. A veces me da la sensación que no tenemos ni idea de los productos de calidad que tenemos, parece eso sí que poco a poco empezamos a despertar. Muchas veces me da la sensación que tenemos que descubrir ahora el grelo o la centolla. Mejor huerta que la nuestra… Muchas veces nos cerramos en banda, no sé muy bien el porqué, cada uno valora su producto como el mejor. Pero sí, comemos bien y si no comemos mejor es porque no queremos.

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