Investigadores y la industria española involucrada celebraron ayer con júbilo el despegue del cohete Atlas-V en cuyo interior se encuentra el vehículo 'Curiosity' que cuenta con una estación medioambiental denominada REMS y que supone la primera vez que un equipo español envía un instrumento a la superficie de Marte.
Desde el Centro de Astrobiología (un centro mixto del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial -INTA- y el CSIC) en Madrid, se seguió la salida del cohete desde la base de la Fuerza Aérea de Cabo Cañaveral en Florida (EEUU), a través de una gran pantalla con tensión y emoción, pasados dos minutos de las cuatro de la tarde, horario peninsular,
El 'Curiosity' tiene como objetivo fundamental verificar la habitabilidad de Marte a través de cuatro aspectos: si hay elementos básicos para la vida, caracterizar su geología, estudiar su historia geoquímica y determinar su posible influencia en la existencia de vida en el pasado. Jesús Martínez Frias, geólogo del centro e integrante del equipo del 'Curiosity', dijo que fue un 'gran orgullo' para todos los involucrados, después de trabajar tantos años, 'que todo haya salido bien y que el lanzamiento haya sido un éxito'. 'Por primera vez participamos con un instrumento propio dentro de un 'rover' (vehículo todo terreno), un 'rover' más sofisticado tanto desde el punto de vista científico como tecnológico. Yo creo que ha sido todo un éxito', explicó Martínez.
La industria española también contribuyó por otras vías en el desarrollo de 'Curiosity', ya que la antena de alta ganancia (capacidad de concentración de la energía en una sola dirección) que usará el vehículo durante su estancia en Marte para el envío de datos a la tierra, fue desarrollada por las empresas Astrium-CASA y Sener.
La antena tiene un peso de ocho kilos, 700 milímetros de ancho.
El 'Curiosity' tiene como objetivo fundamental verificar la habitabilidad de Marte a través de cuatro aspectos: si hay elementos básicos para la vida, caracterizar su geología, estudiar su historia geoquímica y determinar su posible influencia en la existencia de vida en el pasado. Jesús Martínez Frias, geólogo del centro e integrante del equipo del 'Curiosity', dijo que fue un 'gran orgullo' para todos los involucrados, después de trabajar tantos años, 'que todo haya salido bien y que el lanzamiento haya sido un éxito'. 'Por primera vez participamos con un instrumento propio dentro de un 'rover' (vehículo todo terreno), un 'rover' más sofisticado tanto desde el punto de vista científico como tecnológico. Yo creo que ha sido todo un éxito', explicó Martínez.
La industria española también contribuyó por otras vías en el desarrollo de 'Curiosity', ya que la antena de alta ganancia (capacidad de concentración de la energía en una sola dirección) que usará el vehículo durante su estancia en Marte para el envío de datos a la tierra, fue desarrollada por las empresas Astrium-CASA y Sener.
La antena tiene un peso de ocho kilos, 700 milímetros de ancho.
