Uno de cada tres pacientes no responde de forma adecuada a la terapia farmacológica prescrita por su médico, debido fundamentalmente a la desigual respuesta de cada persona a los mismos fármacos causada por la interacción de los medicamentos con los genes, así como con diversos factores ambientales.
Así lo puso de relieve ayer la doctora María Sanjurjo, jefa del servicio de Farmacia Hospitalaria del Hospital Gregorio Marañón de Madrid, durante una jornada científica sobre 'Biomarcadores moleculares, farmacogenética y marcadores de imagen'. Ante un mismo diagnóstico y tratamiento cada paciente responde de manera diferente, una variabilidad que según los datos ofrecidos en las jornadas puede oscilar entre un 20 y un 70%.
Partiendo de estos datos, la farmacogenética, que estudia el efecto de la variabilidad genética de un individuo en su respuesta a determinados fármacos, podría permitir que al menos, la mitad de las respuestas inadecuadas sean previstas y evitadas, según la doctora Sanjurjo. La aplicación de la farmacogenética en la clínica era impensable hace algunos años, pero ahora esa traslación 'es más sencilla, debido principalmente a la mejoría notable de la tecnología de análisis de la información genética y a la disminución de sus costes', explicó la doctora.
En la jornada se puso también de relieve el papel de los biomarcadores moleculares y los nuevos marcadores de imagen en la detección precoz de la respuesta a un tratamiento o la aparición de determinados efectos adversos.
MAYORES DE 65 AÑOS
Además, la posología inadecuada según los medicamentos también supone un problema para el efecto de la medicación sobre el paciente, sobre todo cuando éste presenta problemas renales. Esta es la conclusión que se extrae de un estudio realizado por las farmacias de Cataluña, según el cual uno de cada tres pacientes polimedicados de más de 65 años llega a presentar problemas relacionados con la medicación que requieren ajustar la posología (dosis o frecuencia) de los medicamentos .
En el estudio se determina igualmente que la intervención del farmacéutico permitió reducir, en seis meses, el porcentaje de pacientes detectados de un 28,7% al inicio (uno de cada 3), a un 11,49% (uno de cada diez). Por otro lado, también disminuyó la inadecuación posológica de un 15,3% de media a un 5,15%. En un 26,5% de los casos los farmacéuticos recomendaron a los médicos ampliar el intervalo entre dosis, en un 57,9 disminuirla y en un 15,8 cambiar de medicamento por estar contraindicado en el paciente. Uno de cada dos medicamentos usados presentaba alguna restricción de uso en caso de deterioro renal.
Partiendo de estos datos, la farmacogenética, que estudia el efecto de la variabilidad genética de un individuo en su respuesta a determinados fármacos, podría permitir que al menos, la mitad de las respuestas inadecuadas sean previstas y evitadas, según la doctora Sanjurjo. La aplicación de la farmacogenética en la clínica era impensable hace algunos años, pero ahora esa traslación 'es más sencilla, debido principalmente a la mejoría notable de la tecnología de análisis de la información genética y a la disminución de sus costes', explicó la doctora.
En la jornada se puso también de relieve el papel de los biomarcadores moleculares y los nuevos marcadores de imagen en la detección precoz de la respuesta a un tratamiento o la aparición de determinados efectos adversos.
MAYORES DE 65 AÑOS
Además, la posología inadecuada según los medicamentos también supone un problema para el efecto de la medicación sobre el paciente, sobre todo cuando éste presenta problemas renales. Esta es la conclusión que se extrae de un estudio realizado por las farmacias de Cataluña, según el cual uno de cada tres pacientes polimedicados de más de 65 años llega a presentar problemas relacionados con la medicación que requieren ajustar la posología (dosis o frecuencia) de los medicamentos .
En el estudio se determina igualmente que la intervención del farmacéutico permitió reducir, en seis meses, el porcentaje de pacientes detectados de un 28,7% al inicio (uno de cada 3), a un 11,49% (uno de cada diez). Por otro lado, también disminuyó la inadecuación posológica de un 15,3% de media a un 5,15%. En un 26,5% de los casos los farmacéuticos recomendaron a los médicos ampliar el intervalo entre dosis, en un 57,9 disminuirla y en un 15,8 cambiar de medicamento por estar contraindicado en el paciente. Uno de cada dos medicamentos usados presentaba alguna restricción de uso en caso de deterioro renal.
