El cocinero Martín Berasategui ha presentado hoy una botella que evita que los posos caigan a la copa y a la que ha calificado de revolución total de las bodegas.
Además del sistema totalmente innovador que ofrece esta botella, también el envase que la acompaña supone una novedad, según ha destacado el cocinero donostiarra durante la presentación del denominado Martín Berasategui System.
Este sistema reduce las impurezas que quedan en las botellas de cualquier líquido elaborado a partir de frutas, ya sea vino, licor, zumo o aceite.
El diseño de la botella permite retener estos posos en el fondo, mediante un efecto vacío, con lo que no caen en el vaso al servir el líquido.
Martín Berasategui ha destacado que este sistema es fruto del esfuerzo de cinco socios durante años de trabajo, para desarrollar una idea brillante que marcará un antes y un después en el diseño de botellas.
Ha subrayado que el botellero que las acompaña también es una innovación, ya que permite guardarlas y transportarlas en oblicuo, no en horizontal o vertical como hasta ahora.
Este diseño facilita la decantación del líquido y la posición ideal de conservación en el caso del vino, ha indicado el cocinero.
Además, permite que la botella no duerma desnuda en el jaulón de una bodega, por lo que no será necesario limpiarla antes de sacarla a la venta, lo que supone un ahorro grandísimo en el coste de manipulación.
Berasategui ha calificado de momento histórico la presentación de esta botella y su envase, en cuyo desarrollo han participado, entre otros, el grupo San Cayetano, una multinacional vallisoletana dedicada a los envases, y la Real Academia de la Gastronomía.
La presentación ha tenido lugar en una bodega de Boecillo, cerca de Valladolid, que junto al resto de socios participa en el proyecto a través de la sociedad Investigación y Desarrollo del Vino.
Martín Berasategui cuenta con restaurantes en Guipúzcoa y en Vizcaya, con varias estrellas Michelin.
Este sistema reduce las impurezas que quedan en las botellas de cualquier líquido elaborado a partir de frutas, ya sea vino, licor, zumo o aceite.
El diseño de la botella permite retener estos posos en el fondo, mediante un efecto vacío, con lo que no caen en el vaso al servir el líquido.
Martín Berasategui ha destacado que este sistema es fruto del esfuerzo de cinco socios durante años de trabajo, para desarrollar una idea brillante que marcará un antes y un después en el diseño de botellas.
Ha subrayado que el botellero que las acompaña también es una innovación, ya que permite guardarlas y transportarlas en oblicuo, no en horizontal o vertical como hasta ahora.
Este diseño facilita la decantación del líquido y la posición ideal de conservación en el caso del vino, ha indicado el cocinero.
Además, permite que la botella no duerma desnuda en el jaulón de una bodega, por lo que no será necesario limpiarla antes de sacarla a la venta, lo que supone un ahorro grandísimo en el coste de manipulación.
Berasategui ha calificado de momento histórico la presentación de esta botella y su envase, en cuyo desarrollo han participado, entre otros, el grupo San Cayetano, una multinacional vallisoletana dedicada a los envases, y la Real Academia de la Gastronomía.
La presentación ha tenido lugar en una bodega de Boecillo, cerca de Valladolid, que junto al resto de socios participa en el proyecto a través de la sociedad Investigación y Desarrollo del Vino.
Martín Berasategui cuenta con restaurantes en Guipúzcoa y en Vizcaya, con varias estrellas Michelin.
