Dos años tardó la policía en detener a un joven ruso de 27 años líder de un grupo internacional

Rusia, paraíso del delincuente virtual experto en cibercrimen

Página que aparecía en el ordenador del usuario al ser infectado por el virus creado en Rusia. (Foto: XXXX)
Autodidacta, joven, ruso y sobradamente preparado para el cibercrimen. Ese es el perfil del delincuente virtual que trajo de cabeza a las policías de todo el mundo, y aunque su rastro fue difícil de seguir por su dominio extremo de la informática, finalmente fue cazado. Dos años tardó la policía en detener a un joven ruso de 27 años que infectó millones de ordenadores en todo el mundo mediante un virus que utilizaba la imagen de diferentes cuerpos policiales para estafar al internauta.
Lo hizo desde su casa, al suroeste de Rusia, con un ordenador incluso más rudimentario que el que tienen la mayoría de ciudadanos, pero con el que fue capaz de crear un virus muy eficaz y de liderar una de las organizaciones de cibercriminales más importantes del planeta.

José Rodríguez, inspector jefe del Grupo Seguridad Lógica de la Brigada de Investigaciones Tecnológicas (BIT) de la Policía Nacional y uno de los agentes que le siguió la pista, reconoce que se trata de un verdadero 'crack' de la ciberdelincuencia, y que investigaciones tan complejas como esta pueden tardar 'más de cinco años' en repetirse. 'Era el cerebro de la red, el creador del virus', resume Rodríguez, que asegura que los investigadores creen que llevaría más de cinco años cometiendo este tipo de delitos.


IMAGEN POLICIAL

Así, con unos elevados conocimientos técnicos ideó un sofisticado virus que insertaba en publicidad de páginas web muy visitadas y que lograba bloquear no sólo el ordenador del usuario, sino con la imagen de la policía como señuelo, instarle a pagar cien euros de multa por haber accedido supuestamente a webs de pornografía, descargas ilegales o de actividades terroristas. Para desbloquear su ordenador, la víctima pagaba esa cantidad. Solo en España y parte de Europa logró recaudar un millón de euros anuales, una cantidad ínfima de lo que los investigadores calculan pudo obtener gracias a su criatura virtual en otros países.

La detención en diciembre en Dubai (Emiratos Árabes Unidos) del 'padre' del virus, del que no se ha facilitado su identidad para preservar el curso de la operación, dejó 'más inactiva' su propagación, pero la red no se ha dado por completamente desmantelada.

En España los agentes sí han asestado un golpe importante a una de las células económicas de la organización con el arresto en la Costa del Sol de diez personas -seis rusos, dos georgianos y dos ucranianos-, algunos de ellos con vínculos familiares.

Rodríguez explica que este tipo de cibercriminales llegan a 'externalizar' servicios que él prefiere no hacer mientras que otros pueden vender simplemente el virus por una gran suma de dinero para que otros lo propaguen. En el caso del cerebro del 'virus de la Policía', él aprovechó su propia creación, aunque otros se encargaban de mover el dinero con transacciones virtuales o de contratar personal para que le sumistrara servidores que apenas dejaran huellas de su localización. Finalmente, fue cazado lejos de su ordenador, de vacaciones y de compras en Dubai.

Más de una veintena de cuerpos policiales le seguían pero fue el Grupo de Seguridad Lógica de la Policía española, que llegó incluso a tener que conectarse de madrugada para seguir sus pasos por la red, la que dio sus frutos al detectar que el ahora detenido había proporcionado datos personales que ya tenían relación con su actividad delictiva. Su puesto al frente de la organización es difícilmente reemplazable, según los investigadores, que advierten de que hay más jóvenes de perfiles similares en Rusia, uno de los mayores focos de cibercriminales del mundo.

Te puede interesar
Más en Sociedad