Los restos del autobús escolar siniestrado en 1977, y que todavía permanecen sin recoger y a la vista de quienes se acercan a la zona, se encuentran con un grave problema burocrático, a la hora de ser retirados. Aunque en un principio el terreno donde se encuentran se adjudica al Concello de Vilamartín, 'no está claro que estén en nuestra jurisdicción o en la del Concello de A Rúa, incluso se apunta que este terreno puede pertenecer a Iberdrola. Precisamente este problema fue el que frenó la retirada de los restos hace 35 años', explica el alcalde de Vilamartín, Enrique Álvarez Barreiro.
El regidor se reunía este mismo viernes con responsables del organismo Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) en Ourense, para tratar sobre la retirada de estos restos. Barreiro destacó la buena voluntad de Adif 'que ayudará, pero no lo asumirá en solitario'. La razón de este encuentro es que el autobús siniestrado está situado a escasamente 20 metros de la vía del tren, con lo que para retirarlos es necesario también contar con el visto bueno de Adif. Desde el Administrador ferroviario sólo se apunta que 'el tráfico no puede estar parado más de tres horas seguidas', según explica el regidor de Vilamartín.
Y es que para realizar la operación de limpieza 'hay que cortar a trozos los restos, acceder en un vehículo todoterreno e interrumpir el tráfico ferroviario durante la operación', señala Álvarez Barreiro.
En todo caso, el primer paso es determinar de quien son competencia los terrenos donde se encuentra el autobús accidentado 'o poner de acuerdo a las partes implicadas', apunta el alcalde de Vimartín, que en los próximos días, 'sin fecha', hablará con Iberdrola y contactará con el Concello de A Rúa. También hablará conel parque de bomberos comarcal por si pudiesen colaborar en retirar los hierros, ya que se trata de una operación en la que se requerirá maquinaria y vehículos especiales. 'Es muy complicado', reconoce Álvarez Barreiro, 'pero estamos trabajando para resolverlo, aunque sin ponernos fecha'.
Y es que para realizar la operación de limpieza 'hay que cortar a trozos los restos, acceder en un vehículo todoterreno e interrumpir el tráfico ferroviario durante la operación', señala Álvarez Barreiro.
En todo caso, el primer paso es determinar de quien son competencia los terrenos donde se encuentra el autobús accidentado 'o poner de acuerdo a las partes implicadas', apunta el alcalde de Vimartín, que en los próximos días, 'sin fecha', hablará con Iberdrola y contactará con el Concello de A Rúa. También hablará conel parque de bomberos comarcal por si pudiesen colaborar en retirar los hierros, ya que se trata de una operación en la que se requerirá maquinaria y vehículos especiales. 'Es muy complicado', reconoce Álvarez Barreiro, 'pero estamos trabajando para resolverlo, aunque sin ponernos fecha'.
